El Sindicato Unificado de Policía (SUP) ha denunciado este martes la «grave» falta de medios para proteger a las víctimas de violencia machista, pues en la inmensa mayoría de las comisarías no existen espacios destinados a dar un servicio integral a estas mujeres y en algunas dependencias un solo agente se ocupa de gestionar la protección de más de cien maltratadas.
En lo que va de año 21 mujeres han sido asesinadas a manos de sus parejas o exparejas mientras las Unidades de Atención a la Familia y la Mujer (UFAM) pasan «por un momento de extrema gravedad», según alerta este miércoles el SUP en un comunicado y una carta remitida al ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, al que urge a poner remedio ante el «desbordamiento» de estas unidades «en el peor momento».
El sindicato policial defiende que el anuncio del Gobierno de destinar 100 millones de euros a las comunidades autónomas para combatir la violencia machista no servirá de nada si no se refuerzan los medios humanos y materiales.
«Se habla de habla de actualizar protocolos cuando en realidad lo que hace falta es dinero para poner en marcha los protocolos en vigor», considera la organización sindical que dibuja un escenario con escasos medios para garantizar la protección a las víctimas y cuya solución pasa por aumentan los agentes en las UFAM.
Así, denuncia que en la «inmensa mayoría» de las comisarías no existen espacios destinados a recoger las denuncias de las víctimas y darles un servicio integral de apoyo a ellas y a los menores afectados.
En la mayoría de los casos se recogen en las oficinas de denuncias (ODAC) junto con el resto de asuntos y por funcionarios sin preparación específica.
«Aunque el protocolo vigente establece que en todas las dependencias debe haber UFAM investigación y UFAM protección, la realidad es que en muchas comisarias las valoraciones de riesgo las elaboran el personal de la oficina de denuncias que carece de formación», enfatiza el comunicado, que lamenta que la formación de los agentes de la UFAM llega con años de retraso.
Entre las carencias más graves, el sindicato señala que hay policías absolutamente «desbordados», pues algunos de ellos llevan «hasta un centenar de casos a la vez», por lo que las investigaciones sobre violencia de género las acaban llevando a cabo otros grupos de policía judicial de las comisarías.
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