Mario Suárez y Malena Costa están de enhorabuena por partida doble. El futbolista acaba de fichar por el Guizhou Hengfeng Zhicheng, equipo al que entrena Gregorio Manzano. El jugador se mostraba de lo más contento a través de las redes sociales, al igual que su mujer, que no dudaba en mostrar públicamente lo orgullosa que está de su chico. «Me siento muy orgullosa de ti amor, porque yo sé lo profesional que eres y lo que amas tu profesión y se que haces todo por intentar ser tu mejor versión. Eres la mejor persona que he conocido y te mereces todo lo bueno que te pase en la vida y todo el mundo que te conoce lo sabe, que tienes un corazón gigante. Te quiero y eres lo mejor que me ha pasado en la vida y te deseo lo mejor en esta nueva experiencia que nos brinda la vida», escribía en su cuenta de Instagram.
Y si parecía poco, otra buena nueva ha alegrado los corazones de esta pareja: en cuestión de horas volverán a ser papás. Malena Costa ha ingresado ya en la clínica Rúber Internacional para dar a luz a Mario Jr., parto en el que será atendida por el doctor Luis Ignacio Recasens, más conocido como la 'cigüeña del glamour', por haber trabajado con famosos de la talla de Victoria Beckham, Lydia Bosch o Carolina Adriana Herrera, además de a miembros de la realeza como la reina Letizia o a la infanta Elena. El centro también fue el elegido por Costa para dar a luz a su hija Matilda, que nació en el mismo lugar en marzo de 2016.
La pareja formada por la mallorquina y el madrileño se dio el 'sí, quiero' hace pocas semanas, en una ceremonia sorpresa organizada por el jugador de fútbol. “Pensé que iba a una fiesta… y de repente me encontré en el día de mi boda. Una boda sorpresa para todos, organizada por el hombre de mi vida y ahora mi marido. Nunca hubiese imaginado una boda más bonita, romántica, emotiva», escribió Malena junto a una bonita foto que inmortalizaba el momento. Ahora, convertidos en marido y mujer y con un buen futuro profesional por delante, tienen todo lo que necesitan, con una familia preciosa a la que cuidar.
Ana P. Cabrero