Los tres corredores que han sido trasladados al Complejo Hospitalario de Navarra tras el encierro de hoy, el sexto de las fiestas, han sido dados de alta tras recibir asistencia médica por las contusiones sufridas durante la carrera.
J.A.S., de 29 años y vecino de Vall de Uxó (Castellón), ha sido atendido de «una contusión en la rodilla izquierda provocada por pisotones» sufridos en Estafeta, y J.J.G., de 24 años y residente en Colmenar de Oreja (Madrid), trasladado desde el tramo de Mercaderes, ha sido curado de una «luxación en el hombro derecho y contusiones por caída».
El tercer corredor atendido, O.O.S., de 28 años y vecino de Benidorm (Alicante), había sufrido en el tramo de Telefónica «policontusiones por pisotones».
Con estos tres mozos, durante los seis encierros celebrados hasta hoy han sido trasladados a los hospitales públicos de Pamplona un total de veintitrés corredores, de los que siguen ingresados tres, dos en estado «grave» y un tercero «menos grave».
Los graves son el australiano de 18 años N.W., vecino de Melbourne, quien resultó el día 7 con fracturas en primera, segunda y tercera vértebras lumbares, y del británico M.M., de 20 años, que sufrió el día 9 una herida por asta de toro en el muslo izquierdo.
Ambos, según la información facilitada hoy, presentan una evolución «favorable», aunque el primero está pendiente de una intervención quirúrgica.
El tercer corredor hospitalizado es el pamplonés J.P.L.A., de 37 años, con una herida por asta de toro en el muslo derecho sufrida ayer, aunque en este caso su pronóstico es «menos grave».
Un debut limpio y rápido
Los toros de la ganadería de Victoriano del Río, de la localidad madrileña de Guadalix de la Sierra, han debutado en Pamplona con el encierro más rápido de los sanfermines 2010, al completar en dos minutos y diecisiete segundos todo su recorrido.
Durante su carrera no han corneado a ninguno de los mozos que, en número inferior a los días anteriores pero también significativo, se han dado cita en este sexto encierro de las fiestas.
La manada ha partido a las 08:00 horas de los corrales de Santo Domingo agrupada y encabezada por los mansos y, tras el encuentro con los mozos unos metros más adelante, ha seguido por este tramo veloz y limpiamente.
Al final de esta cuesta un toro negro ha cogido todavía más velocidad y se ha hecho con la cabeza del grupo, pasando, ya separado de sus hermanos, como una exhalación por la plaza del Ayuntamiento y la curva de acceso a Estafeta, donde ni siquiera ha llegado a chocar contra el vallado.
El resto de la torada ha salvado también sin mayores problemas este tramo, de forma que han enfilado Estafeta dos bravos siguiendo de cerca al adelantado y por detrás los tres restantes y los mansos.
La velocidad de estos toros madrileños, cuya presencia en Pamplona había despertado expectación al desconocerse su comportamiento en el encierro, ha posibilitado el lucimiento de los mozos, que se han podido acercar a las astas, si bien alguno de ellos ha llegado también a tocar los lomos de los animales pese a estar prohibido.
En el mismo orden ha discurrido la manada por Telefónica y el callejón, y ya en la plaza de Toros el adelantado, al abrirse un poco hacia la barrera, se ha juntado con los dos que le seguían y han entrado los tres en chiqueros, donde también lo han hecho segundos después sus hermanos.