El programa de artes visuales del ‘Hay Festival’ de Segovia, que se inaugura hoy, conecta las exposiciones entre sí por su temática, de ahí que una colección de imágenes de besos encaje con la reflexión sobre las ideas de identidad y ubicación de la diseñadora inglesa Aine Venables.
¿Qué pueden tener en común el fotógrafo Ricardo Martín y el pintor Rafael Cidoncha?. Que sus obras son analizadas por dos escritores, respectivamente: Antonio Muñoz Molina y su tratado sobre la fotografía -«por donde sigue corriendo la vida humana y el tiempo»-, y Bernard-Henry Lévy, amigo del artista gallego.
De nuevo el filósofo francés aparece a la hora de vincular la obra de Cidoncha con trabajos de vídeo arte sobre Marruecos, un país que es el denominador común de los cuadros del pintor, al que dejó su casa de Marrakech, con lo más moderno en audiovisuales.
Estas conexiones se pueden explorar dentro del programa de artes visuales del Hay Festival de Segovia, que arranca esta tarde, donde se ha incluido a uno de los más grandes de la tierra, Esteban Vicente, el único español en la «Escuela de Nueva York, y al diseñador Alberto Corazón.
Como la celebración de la escritura hecha palabra, Alberto Corazón ocupa con varias esculturas de bronce el patio del torreón de Lozoya, del siglo XVI, de cuyas columnas deslizan unos versos de José Ángel Valente.
En la idea de dar protagonismo a la palabra como escultura, la pieza central, en opinión del popular diseñador, es un fragmento de una conversación que viene sosteniendo con el maestro Brancusi, desde hace muchos años.
En la capilla del museo a quien da nombre uno de los exponentes del expresionismo abstracto americano, se proyecta «Besos, una producción de EFE Televisión con fotografías de los reporteros de la Agencia, custodiadas en su archivo, integrado por 16 millones de instantáneas que conservan la memoria del último siglo.
Fotografía y más
La directora de EFEDATA y de las Colecciones Fotográficas de EFE, Concha Tejedor, explica que el audiovisual trata de poner de manifiesto la capacidad de la memoria, congelada en la fotografía, para conseguir un vuelco emocional, en este caso con un gesto universal como son los besos.
El beso más antiguo que se recoge en el audiovisual es el de un niño lanzado en 1980 sobre el entonces presidente Adolfo Suárez, y el más moderno el del vampiro Kevin Hudson y su compañera de reparto Veronique Spiteri en el musical «Danza con los Vampiros, en febrero de 2010, en el teatro Palladium de Stuttgart (Alemania).
Sin salir del antiguo palacio medieval de Enrique IV, sede del Museo de Arte Contemporáneo, se puede apreciar una muestra de dibujos de Esteban Vicente pertenecientes a diferentes etapas a lo largo de 80 años de creación, que supone como un viaje a su esencia, a las raíces de su obra.
Para la directora del Hay Festival para España, Sheila Cremaschi, según ha explicado hoy a EFE, el programa de artes visuales de esta quinta edición es uno de los más completos y multidisciplinar de los que se han ofrecido hasta ahora, con numerosas conexiones entre las diferentes exposiciones.
El recorrido festivo de la inauguración del programa, que tradicionalmente empieza con un lanzamiento de pétalos de rosa por autoridades, organizadores y artistas, al caer la tarde, partirá hoy del antiguo kiosco de la música de la Plaza Mayor.
En el viejo templete se presenta «Replaced» (Sustituido), de la arista del Reino Unido Aine Venables, experta en trabajos de grabado y procesos múltiples, con piezas únicas y emocionantes en las que se contiene lo nuevo y lo viejo.
Después de tratar de comprender mejor la obra de Vicente a través de sus dibujos y de envolverse en besos -tiernos, apasionados o insólitos-, a ritmo del grupo «Brotherhood of man» y el popular «Save your kisses for me, los participantes en el paseo se acercarán a La Alhóndiga, un antiguo granero medieval.
Allí cuelga sus fotografías Ricardo Martín, con la muestra «Sostener la mirada, entre textos de Muñoz Molina, en torno a imágenes de La Alpujarra que conoció de niño este reportero nacido en Granada.
El proyecto lo ideó en Nueva York, con una memoria potenciada por el viaje, donde los recuerdos se volvieron más nítidos, según confiesa el autor. En el divertido «tour» encabezado por la música de la Big Band Orquesta del British Council School y la Banda y Grupo de Percusión del Colegio Morpeth, de Londres, se alcanzará la Casa de los Picos, donde el Consejo de Madera Estadounidense (AHEC) muestra diseños en madera.
La comitiva acaba en el torreón de Lozoya, desde la rehabilitada casa del Sello de Paños, sede de la Cámara de Comercio, donde se cuelgan los retratos en las aulas de Julian Germain, que forman parte de un proyecto global sobre educación a cargo del British Council.-