A Miley Cyrus le gusta enseñarlo todo. Decidida a enterrar su imagen de chica Disney y olvidarse de su personaje de Hannah Montana no ha dudado en hacerse una foto mientras se hacía un tatuaje.
Cyrus, de 18 años, posa sugerente, sin camiseta ni sujetador, mientras el ‘tatuador’ le dibuja la espalda. Un atrapasueños es el quinto tatuaje de la artista.
Miley ha difundido la imagen en las redes sociales a pesar de su actitud íntima. La cantante suma una cadena de errores, ya que sus padres se enfadaron con ella por el tono picante de su último concierto en Brasil.
Redacción Estrella Digital