Cientos de casetas y miles de libros inundan y adornar desde este viernes el madrileño parque del Retiro. Como todos los años por estas fechas las casetas de la Feria del Libro de Madrid se instalan en los paseos más grandes del emblemático parque para hacer las delicias de los visitantes.
Cientos de libros para todos los gustos y las edades se podrán encontrar en esta feria que lleva 71 años acompañando a los madrileños y a todo el que se quiera acercar. Las últimas ediciones han sido cuanto menos complicadas, y no por el tiempo, que tampoco suele acompañar, sino por la crisis.
El mundo de la cultura suele ser uno de los primeros en notar la crisis, cuando no hay dinero, lo más fácil es reducir el gasto en lo que se refiere a cultura y ocio. Los libros digitales tampoco se lo está poniendo fácil.
Los libreros y las editoriales, a pesar de los malos augurios, pretenden conseguir unas buenas cifras de venta para este año.
357 casetas en las que 272 editoriales, 118 librerías, 24 organismos oficiales y 11 distribuidores, ofrecen los mejores libros y ediciones a los visitantes y lucharán contra una crisis que ahoga la cultura.
Además de las tradicionales casetas, la Feria del libro también nos ofrece multitud de actividades hasta el 10 de junio. Talleres para los más pequeños, cuentacuentos, firmas de libros, mesas redondas, en resumen, más de 250 actividades alrededor de esta tradicional feria.
Los libreros y las editoriales en positivo
A pesar de que la crisis aprieta a todos, y más la mundo de la cultura, la mayoría de los libreros y las editoriales se muestran positivos ante las ventas previstas para este año. «Esperamos que las cifras de ventas se mantengan igual a las del año pasado y si se puede subir un poco, mejor» comentaba uno de los encargados del stand de una librería madrileña.
Ignacio Ugalde, el director de la Casa del Libro de Gran Vía, cree que la venta de libros este año será positiva. «La Feria del Libro es muy variable porque también dependemos del tiempo, y eso te puede cambiar las ventas, quitando eso, tenemos muy buena impresión. Creeemos que esta feria va a ser buena ya que el descuento del 10% hace que mucha gente se anime a comprar».
Respecto a los libros digitales y el daño que pueden estar haciendo en la industria del libro y las editoriales, algunos de los presentes en la feria aseguran no haber notado la bajada de ventas por el formato electrónico.
La casa de Libro, por su parte, lo ve como una introducción positiva, no un daño para la industria. «El libro digital es parte de nuestra oferta, de hecho tenemos el ecosistema Tagus, que tiene su propio e-reader, en ese sentido se nos está dando muy bien y además no tenemos competencia a nivel mundial en número de referencias en formato digital».
Los libreros también comentan la importancia que tiene el libro físico «la gente quiere poder tocar y palpar los libros, el formato digital es más frío», asegura uno de los libreros congregados en la feria.
Para los más pequeños
Dos espacios dedicados a los niños. Por un lado, el pabellón infantil Libri per tutti, que hará visibles los libros populares italianos con Pinocho, Sandokan, Cenicienta, etcétera.
También, habrá otro espacio con actividades dirigidas al fomento de la lectura con talleres que también estarán enfocados al teatro, la música o el arte.
Itziar de la Fuente