Casi irreconocible si no fuera por su rubísima melena. Hace tres meses que está ocupada recuperando su figura, unos kilos que cogió durante el embarazo y que le está costando muchísimo quitárselos de encima. Tras muchos meses especulando sobre si podía o no dejar la comida basura, que si no era capaz de aguantar la dieta, que los que vivían a su alrededor habían tenido que sumarse a su rutina para que ella pudiera seguirlo, etc., ha llegado el momento de reaparecer, y lo ha hecho con una figura envidiable, callando los rumores que han hablado de ella y sus kilitos de más.
De hecho, Jessica Simpson ha decidido mostrar los resultados de su dieta en televisión, aún sabiendo que las cámaras engordan la figura, pero no le ha importado porque ha demostrado que finalmente ha sido más fuerte que las tentaciones dulces.
Y toda orgullosa se ha presentado en el talk show de Katie Couric en la cadena ABC, aunque ha admitido que en este momento todavía no se siente cómoda para mostrar todo su cuerpo.
Realmente es sorprendente que en tan solo 3 meses haya perdido más de 18 kilos, aunque todavía no ha llegado al final de su plan impuesto por Weight Watchers, quienes le han indicado que tiene que perder un poco más para quedarse en su peso ideal.
Ahora dice que todavía le quedan unos 5 kilos más para adelgazar, y se está ayudando de su hija para conseguirlo. «Me la llevo siempre conmigo», cuenta Jessica, «mi nueva meta es de 14.000 pasos al día».
Pero además de contar cuál es el plan que está llevando, también ha presentado su nueva colaboración con la empresa que está haciendo posible que ella se haya puesto a dieta, Weight Watchers.
Jessica Simpson ha hecho un anuncio en el que ella se presenta como nueva embajadora de la firma, cogiendo el relevo de Jennifer Hudson quien comenzó prestando su imagen y su figura a esta empresa.
Ahora que ha reaparecido, tendrá que trabajar más duro para recuperar su peso ideal, porque más que nunca su evolución está vigilada muy de cerca.