La duquesa de Cambridge está «disgustada y decepcionada» y todo por unas imágenes suyas que protagonizan la portada de la revista francesa Closer. Tal vez, la esposa del primogénito del Príncipe Carlos debería haberlo pensado antes de hacer topless en un yate durante sus vacaciones en la Provenza, porque lo más probable era que algún fotógrafo avispado la pillara y vendiera las fotos por una millonada, como ha pasado.
Los ingleses están indignados y es que no entienden como la aparentemente perfecta Kate Middleton ha podido tener tal descuido. Las comprometidas imágenes las tomó un fotógrafo durante las vacaciones de Kate y el príncipe William. Según la BBC, aún no se puede confirmar la veracidad de las instantáneas, pero como apuntan en las redes sociales, si no son reales ¿por qué le molestan a la duquesa?
Muchos apuntan a la misma metedura de pata que tuvo su antecesora y suegra, Lady Di, que fue retratada mostrando sus pechos en las playas de Mijas, Málaga. Las fotos de la princesa Diana nunca vieron la luz ya que fueron adquiridas por Hola pero Kate no ha tenido tanta suerte.
Itziar de la Fuente