Dicen que los preparativos de una boda pueden poner de los nervios a cualquiera, pero viendo a la princesa Magdalena de Suecia nadie lo diría. La joven ultima todos los detalles de cara a su gran día, mostrándose ilusionada y feliz según se acerca la fecha. El enlace se celebrará en la tarde del sábado 8 de junio, en la capilla del Palacio Real de Estocolmo. El afortunado es el empresario anglo-americano Christopher O’Neill, hijo de una conocida austriaca de la alta sociedad y de un banquero especialista en inversiones. Asimismo, estudió en una de las mejores universidades de negocios de Estados Unidos.
Chris se prometió a la hija menor de los Reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia en octubre de 2012, aunque su idilio comenzó dos años antes en Nueva York, lugar donde se ha podido ver últimamente a la princesa realizando algunas compras y, tal vez, recordando románticos momentos.
El futuro enlace es un motivo de alegría para la familia, y contrasta con los duros momentos por los que ha tenido que pasar la Casa Real del país nórdico en el último mes, debido a la muerte de la princesa Lilian, la cercana y querida tía abuela de la princesa Magdalena.
Pese a todo, la princesa ha sabido reponerse con la naturalidad y elegancia que siempre le han caracterizado. Esos atributos son los que crean mayor expectación y curiosidad ante su secreto mejor guardado: el vestido que llevará en el día más importante de su vida.
Estrella Digital/EP