Hoy en día no se sabe qué es peor, si perder el móvil o quedarte sin cuenta de twitter. Para el personal es casi peor cualquiera de las dos opciones que le dictaminen un cáncer o un tumor. No pueden vivir sin el uno ni sin lo otro. Quedarse sin ello es como estar «secuestrado», como si les hubieran subido a un «apollo» y les hubieran enviado directamente a la luna o a cualquier galaxia muy, muy lejana. En esas están ahora los protagonistas de «Gandía Shore», a los que la productora les ha dejado… ¡sin cuenta de Twitter!.
Lo de menos para ellos es casi haberse quedado sin trabajo. Lo grave es que al no hacerse definitivamente la segunda temporada del «reality», por aquello de que el futuro del canal, con la intención del Gobierno de reducir el número de ofertas de TDT para adaptarse a las normativas europeas, es más negro que el de Olvido Hormigos como política, MTV ha confiscado las cuentas en Twitter de sus protagonistas. Como, afortunadamente para ellos, con Facebook no han podido, ya ha quedado patente que su indignación con la medida no tiene límites.
En base a que «este Twitter es de un producto», el canal decidió este domingo cambiar las contraseñas, para que ninguno de sus protagonistas pudiera ya acceder a él, por lo que «ilustres» del espacio como Ylenia han denunciado en las otras redes sociales la medida, porque, según ella, les han hecho perder miles de seguidores, con lo caros que se cotizan éstos hoy en día (debe ser que su intelecto no les da tampoco para hacerse una nueva cuenta de twitter).
Ya en un segundo plano, aunque para el resto de la humanidad esa pérdida es irreparable (con el nivel de los comentarios de esos «twitters» se podría haber descubierto cualquier remedio contra el cáncer o el alzheimer) los concursantes del «reality» también han mostrado su malestar por la gestión tanto de MTV España como de Magnolia, la productora, porque, según ellos, les habían pedido que no aceptaran «bolos» veraniegos para poder grabar las nuevas entregas del espacio, y ahora les han dejado compuestos y sin dinero.
Dado que parece difícil que otra cadena quiera heredar este formato tan educativo, y que sin la tele ni en el «H & M» les pueden ofrecer un contrato, los «shores» ya han empezado a buscarse su futuro por separado, como ha hecho Esteban, que este martes comienza su aventura en «El campamento de verano» de Telecinco, otro programa que seguro que va a tener su altar particular en la historia de nuestra televisión. A Bogart siempre le quedará París y esta gente siempre les quedará la «cadena amiga».