Lo que funciona no hay que tocarlo. Una de las máximas televisivas la llevará casi a la práctica «La Voz», por mucho que la productora Boomerang hable de «grandes novedades» para su segunda entrega. El espacio no sólo repite presentador, en la persona de Jesús Vázquez, aunque contará también con la ayuda de Tania Llasera, sino también tres cuartas partes de sus «coaches» (la agenda de Melendi ha impedido el pleno, siendo reemplazado por Antonio Orozco), y cuarto y mitad de los candidatos antiguos, ya que, como un portavoz de la productora reveló a Estrella Digital, «contaremos también con algún participante de la primera temporada».
Sin duda que pesan mucho esos 5.169.000 espectadores de media que tuvo al final el espacio, con una cuota de pantalla del 34%, que le convirtieron en el programa de entreteniiento más visto de los últimos años. Gracias a ese reclamo, en esta ocasión se han presentado a los castings nada menos que 15.000 aspirantes, de los que ya sólo quedan 130, que serán los que desde este viernes competirán en las «audiciones a ciegas» para poder ser uno de los 64 finalistas que formarán parte de los cuatro equipos que capitanerarán los «veteranos» David Bisbal, Malú y Rosario Flores, más el neófito Antonio Orozco.
Manuel Villanueva, director de Contenidos de Mediaset, precisó que «uno siempre debe volver a los sitios donde fue feliz, y aquí lo fuimos durante tres meses». No es de extrañar que por ese motivo a Jesús Vázquez no le haya importado «recorrer España de arriba-abajo y de izquierda a derecha» para buscar posibles candidatos, porque, como él mismo asegura, «pusimos el listón muy alto».
A pesar de esa continuidad, Encarna Pardo, la directora de Contenidos de Boomerang y productora ejecutiva del espacio, señaló que «sí que habrá muchas novedades» en esta nueva entrega. Para empezar, al margen de Antonio Orozco, del que dijo que «era una de nuestras primeras opciones», el programa estrenará un plató de 2.100 metros cuadrados, que incluirá la escenografía principal y diversos sets alternativos y que cuenta con una capacidad máxima de 800 personas. del resto de variantes dijo que «no puedo contar nada», y hasta ahí pudimos saber los presentes.
Según ella, para esta ocasión han trabajado bastante la cuestión del sonido, uno de los temas que más se criticó en las redes sociales en la primera temporada, «aunque el problema realmente está en que pretendimos que las galas fueran conciertos cuando en realidad se trataba de un programa de televisión». Lo que es seguro es que Melendi no regresará, «a no ser que sea de visita», y que los cuatro «coaches» continuarán hasta el final de esta segunda edición, y puede que alguno de ellos incluso esté también presente en la versión «La Voz Kids», para los más pequeños, que estará en antena cuando finalice la emisión del programa, cuyo estreno está previsto para el otoño.