La actriz Amanda Bynes ha dejado el centro psiquiátrico de la Universidad de California de Los Ángeles (UCLA) para trasladarse a un centro de rehabilitación de lujo en Malibú, según informa TMZ. En la nueva residencia no estará a disposición de los innumerables servicios psiquiátricos que dispone en el centro de UCLA.
Meses atrás se le diagnosticó de enferma mental e incluso esquizofrénica debido a sus continuos cambios de look extravagantes y sus trifulcas vía Twitter. Expulsada de varios sitios, fue incluso puesta a disposición judicial y detenida por estar relacionada con la marihuana.
Poco a poco, la actriz fue entrando en una espiral de la que le costará mucho salir. Sus padres comenzaban a preocuparse por ella y no dudaron en ningún momento en internarla en el centro de UCLA. Sin embargo, según informa el abogado de Amanda, Tamar Arminak a TMZ.com, la actriz «está dando grandes pasos hacia la recuperación». Un motivo más que suficiente para trasladarse a The Canyon, un centro exclusivo de rehabilitación en Malibú.
Fuentes cercanas a la actriz comentan que en el centro de UCLA había personas «en peores condiciones mentales que ella» y que estaba «asustada y temerosa» por ello.
Sin embargo, según informa Radar Online, los padres de Amanda Bynes están molestos por la publicación de nombre del centro. «Necesita estar alejada de los medios de comunicación. Algunos medios de comunicación no tenían por qué decir el nombre de la instalación en la que se encuentra». El miedo a que sea fotografiada y vuelva a estar en el ojo del huracán mediático son algunas de las inquietudes que muestran los padres de Amanda Bynes.