Aunque será difícil superar la disparatada gala que condujeron en 2003 los dos miembros de la compañía teatral Animalario Alberto San Juan y Guilllermo Toledo, con máximos históricos en cuanto a politizacion se refiere, será complicado que la gala de este año de los Goya, que presentará finálmente Manel Fuentes, no tenga también a cierto ministro como protagonista.
De momento, el presidente de este organismo, Enrique González Macho, quiso dejar claro que ellos no han cursado invitación alguna a Cristóbal Montoro, porque «normalmente sólo invitamos al ministro de Cultura, y en alguna ocasion al de Asuntos Exteriores, por algún acuerdo concreto». Eso sí, tampoco negó su presencia, «si se quiere autoinvitar será bien recibido».
El elegido para presentar el acto puntualizó al respecto que «la máxima será que la gala sea dinámica y una foto de amor, pero los premiados tendrán toda la libertad del mundo para decir lo que quieran». Por lo que a él respecta, ya que también será el director, indicó que sus textos «no estarán ausentes de ciertas ‘puyitas'». Segú él, «lo que es cierto es que este año el chiste asociado a Coronado y Carmen Machi ha cambiado por el que tiene a Montoro de protagonista».
Manel quiso agradecer a la casa que le paga en la actualidad, AtresMedia («Tu cara me suena»), por haberle permitido aceptar este encargo, pues «se trata de un evento que traspasa la frontera de un simple programa de TV», y dijo que «estar al lado del cine español es todo un orgullo». Para él, el objetivo es «que el cine salga más fortalecido, que sea una cosa de todos, porque es algo que tiene la creatividad y sale al exterior, algo que necesita el país».
Respecto a si tiene intención de parecerse a alguno de los que le han precedido en la presentación de la gala de los Goya, Manel Fuentes recordó que «cuando vi con posterioridad una gala que había presentado Rosa María Sardá junto a ella creía que nadie más podía hacer esa labor, pero lo cierto es que los que lo han hecho en años posteriores hicieron un trabajo extraordinario». Es más, cree que «haríamos mal si intentáramos parecernos a alguien, porque siempre sería mejor el modelo original».
Hay que recordar que en los dos últimos años esa labor de presentación la llevó a cabo Eva Hache, a la que precedió los dos años anteriores Buenafuente. Antes de éstos los Goya contaron, entre otros, con presentadores como Carmen Machi, la citada Sardá, que repitió hasta en tres ocasiones, e incluso el mismísimo Wyoming, que se hizo cargo de la de 1998.
La ceremonia tendrá lugar en el Auditorio Príncipe Flipe del Hotel Audiotorium de Madrid el próximo 9 de febrero, y un mes antes, el 7 de enero, será el día en el que se sabrán todos los nominados. Entre medias, el 20 de enero, será la «Fiesta de los nominados», para la que todavía se desconoce su emplazamiento y a la que la Academia quiere dar una importancia «muy grande», habida cuenta de que será el día donde se entregará el Goya de Honor, concedido en esta ocasión a Jaime de Armiñán.