Primero reapareció ante los medios, apenas unas semanas después de enviudar, para presentar una campaña publicitaria de unos teléfonos. En aquel entonces sólo quiso hablar en pequeños corrillos y sólo quiso hablar de su profesión. Este miércoles, Raquel Sánchez Silva ha vuelto a ejercer de maestra de ceremonias de la gala de entrega de premios de la revista ‘Cosmopolitan’, y, pese a no querer hablar con ningún medio, aprovechó una de sus intervenciones para lanzar una «puyita» a la Prensa.
Fue en el momento en que tuvo que entregar uno de los galardones a Ana Pastor. Primero halagó a la presentadora de «El Objetivo» de La Sexta y después aprovechó esas mismas loas para llamar la atención a los medios allí presentes indicándoles que la susodicha «no solo contrasta la información, sino que busca la verdad y hace algo que muy pocos periodistas se atreven a hacer, que es repreguntar y repreguntar hasta que encuentra la verdad».
Lo cierto es que pocos o casi ninguno de los medios ha podido llevar a cabo eso, ya que desde que el pasado 30 de mayo se conocía la noticia de la muerte de su marido, el cámara de «Master Chef» Mario Biondo, ha estado todo el verano apartada de la vida pública y son su representante o su gente quienes intentan explicar su postura tras las desavenencias con la madre y hermanos de Mario, que incluso han pedido la exhumación del cuerpo, algo qu eles ha sido denegado.
Lo único que se sabe de ella es que ha dejado el piso en que vivía, que ha devuelto las pertenencias de su esposo y que ha visitado una clínica de fertilidad para tratar de quedarse embarazada, algo que intentó en vida de Mario justo antes de fallecer y que parece que sigue buscando con denuedo. Difícil preguntar, como ella dice, a quien se niega a responder.