La profunda conciencia medioambiental de la estrella de Hollywood podría haberle llevado a abandonar los artículos de higiene corporal más básicos para asearse con una combinación de productos mucho más respetuosa con la madre naturaleza: un preparado de limones, agua, y vinagre de manzana que, a pesar de no ser muy efectivo, no ejerce ningún tipo de efecto negativo en nuestro ecosistema.
«Brad nos ha dicho que no puede dejar de leer sobre las toxinas que tienen los jabones, especialmente los antibacterianos, que deben de ser muy perjudiciales para nuestro entorno y, además, parece que provocan un envejecimiento prematuro de la piel. Ha decidido dejar de utilizar champús y geles de baño por una mezcla de compromiso con el medio ambiente y una pizca de vanidad», reveló al diario The Sun una fuente cercana al artista.
La decisión del famoso intérprete puede estar justificada por multitud de razones, pero está claro que no ha sido acogida con demasiado entusiasmo entre los miembros de su familia. Como asegura el mismo informante, Angelina Jolie no ha dejado de quejarse a sus amistades íntimas de que su futuro marido huele como «un perro ovejero», mientras que los seis hijos de la pareja habrían empezado a referirse a él como «papá apestoso» para entretenerse durante las tardes de juegos que comparten con su padre.
«Angelina le ha dicho que puede hacer lo que quiera mientras ella no esté en casa y les separen kilómetros de distancia, pero que no piensa compartir la misma habitación con él a menos que pase por la ducha como una persona normal», añadió el mismo confidente.
Por el momento, es poco probable que las nuevas pautas de higiene de Brad Pitt perjudiquen a su estable relación con Angelina, ya que el actor se encuentra actualmente rodando la película ‘Fury’ en Londres, mientras que la oscarizada intérprete hace lo propio en Australia.