El bailaor cordobés Joaquín Cortés llega el 2 de mayo, para quedarse hasta el 4, al Teatro Tívoli de Barcelona el estreno mundial de 'Gitano', una obra en la que, a diferencia de producciones anteriores, ahondará más en sus raíces flamencas.
Según explicó Cortés en rueda de prensa, 'Gitano' es una superproducción que cuenta con ocho bailarinas, dos bailaoras, un cuadro flamenco a ocho voces y 17 músicos en directo, que interpretarán música original, que estarán acompañados por un montaje de luces y audiovisuales.
El artista, elegido como uno de los diez mejores de la historia de acuerdo con distintas listas especializadas, señaló que, aunque no habrá pausas, el espectáculo se divide en dos partes: la primera, más ortodoxa y más fiel a las raíces gitanas, contará con la colaboración de dos jóvenes bailaoras «para potenciar su carrera», según señaló Cortés.
En la segunda, el bailarín será más fiel a su sello personal, que le ha llevado a actuar en teatros de todo el mundo, y ejecutará coreografías que fusionan estilos tan distintos como el flamenco, el ballet clásico y jazz, entre otros, con vestuario del diseñador italiano Giorgio Armani, de quien se ha confesado amigo.
«Ya sabéis todos que tras la muerte de mi madre estuve muy mal y hasta se me quitaron las ganas de bailar. Pero ya han pasado cinco años y ahora estoy mejor y vuelvo a tener muchas ganas de entregarme al cien por cien en el escenario», reveló.
El artista señaló que con su nueva producción vuelve a encontrarse con ilusión, ya que después de la muerte de su madre en 2008 se había recluido, ya que su motivación para convertirse en el número uno era hacer que su madre «estuviera orgullosa».
Cortés lamentó que en España no se apoye la cultura, ya que según manifestó, en otros países, como Rusia, le ofrecen subvenciones y teatros para que se establezca y enseñe a los bailarines, y nunca recibió una propuesta similar de la administración española, aunque sí reconoció que le ofrecieron la dirección de la Compañía Nacional de Danza en un par de ocasiones, pero que resultó para mantener la independencia artística de la que goza con su propia compañía.
Afirmó que, junto al fallecido guitarrista Paco de Lucía, llevó la cultura española al mundo entero, ya que consiguió que la Unesco nombrara Patrimonio Inmaterial de la Humanidad su legado en 2009, un año antes de que el flamenco mismo obtuviera el mismo reconocimiento por parte de la institución, pero que esto no ha evitado que en España se le trate como a «uno del montón» mientras en países extranjeros se le recibe como si fuera un mito viviente.
«He viajado a países donde el único español que había llegado antes era Julio Iglesias»
«Soy gitano y soy nómada. He llevado el nomadismo al siglo XXI y he recorrido el mundo entero. Eso me ha abierto fronteras que se pueden apreciar en las coreografías de este espectáculo, sobretodo en la segunda parte», aclaró.
«He viajado a países donde el único español que había llegado antes era Julio Iglesias y he llevado la cultura española y el flamenco a lugares donde no había estado antes», aseguró. Sin embargo, el bailaor cree que España no le ha dado el reconocimiento que merece y ha constatado que le reciben con más honores en otros puntos del planeta.
«Hay muchos países donde me pondrían un teatro y todo lo que yo pidiera para que me quedara, bailara, creara coreografías y formara a otros bailarines, sin embargo en España nadie ofrece nada», dijo.
Asimismo reconoció que le han tentado en varias ocasiones con el cargo de director del Ballet Nacional, pero lo ha rechazado porque su condición es «tener carta blanca» y no está dispuesto a «obedecer a políticos que no saben nada de danza».
Después de Barcelona, Cortés se dirigirá a Pamplona, para posiblemente volver a la Ciudad Condal y seguir por Valladolid y Madrid. Explicó que, a pesar de que la compañía girará internacionalmente, y que probablemente empezará en Asia, quiere aprovechar y recalar en ciudades españolas además de Madrid y Barcelona.