Setecientos años lleva el soneto entre nosotros. Aunque pueda parecer una modalidad de poesía propia de tiempos pasados, el soneto parece tener en nuestros días más vitalidad que nunca. Buen ejemplo de ello es el libro ‘Sonetos para el siglo XXI’, recientemente publicado por Ediciones Vitruvio, en cuyas páginas se han reunido quince poetas contemporáneos en torno al soneto. Una forma de expresión poética que, a juzgar por los espléndidos poemas que encontramos en el interior de este nuevo libro, no ha perdido un ápice de vigencia. Sonetos firmados por poetas que ‘han sabido dedicarle al soneto un lugar importante en su obra’. Manteniendo, así, viva la llama de una tradición fundamental de la poesía universal y española, desde que Garcilaso de la Vega en nuestro Siglo de Oro comenzara a escribir sonetos en lengua castellana.
‘Sonetos para el siglo XXI’ da continuidad a la apuesta de Ediciones Vitruvio por el soneto, que ya en 2008 publicó ‘Cincuenta sonetos esenciales’ introducidos y seleccionados por el poeta Pablo Méndez. El libro ‘Sonetos para el siglo XXI’ contiene setenta y cinco sonetos, cinco poemas de cada uno de los autores presentes en esta escogida muestra. Autores de extensa y reconocida trayectoria en el género poético como Antonio Gamoneda, Carlos Murciano, Carmina Casala, Antonio Hernández, Justo Jorge Padrón, Luis Alberto de Cuenca, José María Muñoz Quirós o Luis García Montero, se unen en este libro a otras voces destacadas de igual calidad y altura literaria como Pedro Cordero Alvarado, Modesto González Lucas, Santiago Castelo (fallecido en 2015), Francisco Moral, Carlos Aganzo, Idoia Arbillaga y Antonio Daganzo.
Como advierte Modesto González Lucas en el prólogo de esta obra, la lista de poetas que a lo largo del tiempo han escrito sonetos es ciertamente prestigiosa. Desde Petrarca a García Lorca, pasando por Góngora, Quevedo, Shakespeare, Baudelaire, Rilke, Unamuno, Juan ramón Jiménez, etc., han empleado el soneto para construir sus poemas. Quizá porque como afirmaba Gerardo Diego, el soneto era ‘la forma más evangélica del continuo mensaje o envío de la poesía’ y ‘la mayor garantía contra la injuria del tiempo y la corrupción de la lengua’.
De esta forma, en los versos del asturiano Antonio Gamoneda podemos atisbar como ‘La belleza y el ansia se desbordan / La música se eleva transparente’. Entre otros elementos, sorprende en este libro la elaboración y temática actual de poemas como los del gaditano Carlos Murciano, dedicados a la nave Juno en la órbita de Júpiter, al asteroide 2013 D-A,14 o al proyecto George Church de alumbrar un neandertal. Sonetos repletos de humanidad y no exentos de humor.
También conmueven al lector sonetos como los que Cordero Alvarado dedica a sus padres y González Lucas a su hermana fallecida, así como los versos del desaparecido Santiago Castelo donde hallaremos ‘La luz hecha voz que ni el dolor calla’. Igualmente, los sonetos ‘Vendrá pronto la luz’ de Antonio Hernández, ‘¿Cómo volver a amar lo que se olvida?’ de Justo Jorge Padrón o ‘Primer amor’ de Muñoz Quirós son más ejemplos de este atrayente compendio de sonetos escritos para el siglo XXI. Como también lo son los sonetos ‘del amor atómico’ o ‘del amor de oscuro’ de Luis Alberto de Cuenca.
Excelentes maneras todas ellas de interpretar el soneto para dotarlo de un impulso nuevo en estos tiempos. Así lo hace Luis García Montero en sus cinco poemas, donde nos regala una singular ‘Poética’, un brillante ‘Soneto herido’, escrito al observar ‘La lluvia en el cristal de la ventana…/…la noche de Madrid y su mañana’, y los versos del soneto ‘Con Antonio Machado’ en el que este poeta nos descubre que ‘Con la certeza de la vida incierta, / el corazón pregunta lo que siente’. Señalados poemas en los que surgen figuras emblemáticas de las letras como Baudelaire, Antonio Machado, Pere Gimferrer Chus Visor o Joaquín Sabina.
Dos mujeres poetas emergen en este libro. Por un lado, Carmina Casala. Leyendo sus sonetos sabremos que el poema otorga a esta magnífica autora todo lo necesario, ‘Con él llega la paz…’ escribe en su soneto ‘El corazón de Carmen habla de sí misma’. Por otro, Idoia Arbillaga aporta a las páginas de estos ‘Sonetos para el siglo XXI’ poemas de sobresaliente factura como ‘Sueña la sed’, ‘Señales’ o `La hija de Midas’.
Asimismo, Francisco Moral y Carlos Aganzo contribuyen a este libro con poemas que proporcionan, sin duda alguna, excelencia, dinamismo y auge al soneto. Ahí están, los poemas de Moral titulados ‘Es un sonido’ o ‘sms’ y el soneto de Aganzo escrito ‘A ti que no te gustan los sonetos’ o su homenaje a José Hierro con el título ‘Todo o nada’.
Cierra el libro el poeta Antonio Daganzo que en esta ocasión nos deleita con poemas como el ‘Soneto del amor hablado’, donde ‘Audaz el verbo acude a nuestra cita’. Poemas, como no podía ser de otra forma en Daganzo, repletos de musicalidad, confeccionados con esmero y un léxico cuidado. Es el caso de los sonetos ‘Llegaste cuando el árbol sin la fecha’, ‘¿A quién daréis la paz, perros de arena…’ o ‘Tus ojos son el vuelo detenido’.
El soneto nació hace siete siglos en Sicilia, bajo el reinado de Federico II (tercer hijo de Pedro III de Aragón). La respuesta a por qué poetas de hoy siguen escribiendo sonetos puede estar en que, como nos dice González Lucas, ‘al final todo se sustenta en la música, el soneto, antes que nada’. Ahora solo queda disfrutar de este poemario lleno de deliciosos ‘Sonetos para el siglo XXI’, rubricados por poetas que forman parte indiscutible de nuestro patrimonio literario.
Francisco J. Castañón