Donna Leon (New Jersey, 1942) se ha ganado a pulso el codiciado título de gran dama de la novela negra en todo el mundo. Tras 27 obras y una saga memorable con el comisario Brunetti como personaje central, Leon ha contribuido a renovar este género literario y sus seguidores se cuentan por millones en todo el mundo. Sus best sellers publicados por Seix Barral, siempre ambientados en una Venecia tan bella y voluptuosa como pestilente y llena de sombras, crímenes y corrupción, rebosan los escaparates de las librerías en los cinco continentes. Leon ha pasado por el festival Valencia Negra, donde ha llenado de fans el Teatro Talía
¿Cómo nació el comisario Brunetti? ¿Es solo ficción o se inspiró en algún policía que ha conocido en el mundo real?
Brunetti, tal como lo imaginé por primera vez, era un hombre de cierta edad y posición al cual enviaban a investigar la muerte de una persona famosa. Me lo imaginé como alguien que ha estudiado Derecho. Muchos saben que se ha casado con su primer amor de la universidad y que ambos tienen dos hijos. También quería que fuese un hombre con el que yo pudiera tener el placer de cenar. No quería que fuese el prototipo de detective privado de las novelas negras bebedor y mujeriego. Brunetti es inteligente, culto, divertido, reflexivo, un gran lector.
En sus novelas, Venecia es otro gran personaje. ¿Cómo puede la ciudad más bella del mundo esconder la oscuridad, los crímenes, la corrupción?
Creo que muchas personas están interesadas en ese contraste: la ciudad más bella del mundo y el crimen. En realidad, hay muy poco crimen en Venecia, aunque me imagino que podría haber la cantidad normal de corrupción como en cualquier ciudad europea.
En España estamos acosados por numerosos casos de corrupción. ¿Es Italia un país tan corrupto como el nuestro?
No tengo idea de cómo de corrupta es España, pero la mayoría de los italianos creen que su Gobierno es corrupto de muchas maneras. Ciertamente, sus políticos están muy bien pagados y a menudo terminan detenidos. Los periódicos están llenos de historias acerca de por qué los arrestan. Creo que es suficiente que la mayoría de las personas crean que sus políticos son corruptos para justificar mis historias sobre corrupción.
¿Es la corrupción el gran mal de nuestro tiempo, lo que impide al ser humano avanzar hacia un futuro mejor?
Parecería que la corrupción detiene o impide el progreso social. Lugares como Finlandia, Suecia y Noruega, donde hay poca evidencia de una corrupción profunda, tienen niveles de vida muy altos, lo que sugiere que el dinero que la gente roba de manera corrupta contribuiría al bienestar general de los ciudadanos del país.
¿Cómo ve Donna Leon el mundo de hoy? ¿Es pesimista u optimista sobre los grandes problemas como el terrorismo, la pobreza en el tercer mundo, el cambio climático…?
No soy tan pesimista sobre el terrorismo como con el aumento de la temperatura del planeta y la creciente contaminación de los mares. En el mundo occidental, ¿cuántas personas son asesinadas por terroristas cada año? Seguramente menos de las que mueren en incendios o accidentes, tal vez incluso menos de las que fallecen por caídas fortuitas en sus propios hogares. Creo –aunque confieso que soy una talibán sobre el tema del medio ambiente–, que tenemos un solo gran problema, y es el calentamiento global y la contaminación de los mares. Los humanos han declarado la guerra a la naturaleza y creen que la están ganando: pueden destruir las plagas de insectos, cambiar la temperatura de sus casas y edificios y hacerlos más fríos o más cálidos de lo que la naturaleza quiere hacerlos. Pero el costo final de todo esto va a ser un mundo natural devastado, quizá un coste más alto de lo que creemos que será.
Ha escrito más de 27 novelas. ¿Por qué cree que sus lectores siguen apasionados por las aventuras del comisario Brunetti?
Creo que se sienten cómodos con el intento continuo de este hombre de mejorar un poco el mundo, sin importar cuán complicado o difícil le parezca. Brunetti sigue siendo un hombre relativamente feliz: tiene una familia feliz, es inteligente, lee mucho, muestra afecto por la gente en general y vive una vida interesante. Él es el tipo de persona con la que podrían pasar una velada agradable. Creo que es su simpatía lo que atrae a las personas hacia él.
Cuando comenzó a escribir novela policíaca, hace ya varias décadas, usted era una de las pocas mujeres que cultivaban el género. ¿Cree que actualmente hay una novela negra especialmente femenina?
En el caso de la ficción criminal en inglés, al menos la mitad es y ha sido escrita por mujeres. Esto es cada vez más así en otros países. Yo leí a los clásicos y la historia, así que no tengo una idea clara de quién escribe la ficción del crimen hoy, pero me parece que las mujeres aún contribuyen con la mitad en inglés.
¿Por qué cree que la gente todavía sigue apasionándose por novelas policíacas y de detectives? ¡Con la de historias negras que se han contado ya!
La clásica novela policíaca hace lo que la vida no hace: explica quién fue el responsable de un crimen y por qué, y luego generalmente castiga a esa persona de alguna manera. Creo que las personas anhelan este tipo de solución a las cosas terribles que tienen lugar en el mundo.
Con el apellido «Leon» en su carné de identidad, seguramente se sentirá una ciudadana muy mediterránea…
El padre de mi padre nació en León, y he pasado la mayor parte de mi vida en una cultura mediterránea, así que, sí, me ha seducido y encuentro irresistible su facilidad, belleza y encanto.
¿Piensa retirar a Brunetti en los próximos años?
¡Dios santo, no!
O quizá esté pensando en liquidarlo como Conan Doyle a Sherlock Holmes…
Nunca lo mataré: me gusta demasiado.
Redacción