Desde el viernes 13 hasta este domingo, la visita al Museo Nacional del Prado ha sido gratuita para todos sus visitantes tanto para la colección permanente como las exposiciones temporales, aunque las personas que no han entrado han tenido también la posibilidad de ver cómo obras maestras de la pinacoteca cobraban vida en una de sus fachadas.
Ha sido con un espectáculo visual que ha tenido lugar en dos pases diarios, de viernes a domingo, consistente en la proyección tridimensional con dos obras ideadas para la ocasión.
Con la primera de ellas, llamada «Refracción: del caos a la quietud», el museo ha querido mostrar un conjunto de obras menos conocidas con ejes temáticos como alegorías, flores, visiones o mitología y estilísticos como el gótico, el romanticismo o el impresionismo. Imágenes que han sido acompañadas por música en directo compuesta por Olivier Arson.
«Amalgama El Prado», ha sido otro de los espectáculos proyectados en la fachada del museo. Una obra creada por el artista Daniel Canogar, que utiliza un algoritmo informático para descomponer las pinturas de la colección y convertirlas en obras abstractas que se representan en la fachada.
Y en las Salas del Edificio Villanueva tuvo lugar el sábado una performance protagonizada por la Orquesta Sinfónica de Castilla y León, acompañada por un cuerpo de baile, donde se representaron piezas como «Madamina, il catalogo è questo (Aria para barítono de Mozart)», «Andante» (Stravinski), «Deh vieni alla finestra» (Aria para barítono de Mozart), «X14» (Alejandro Garrido) y «Aprite un po´ quegli ochhi» (Ara para barítono de Mozart), bajo la dirección de Alejandro Garrido.
Como parte de las actividades de esta recta final y bajo el lema «Un Bicentenario para la historia, un mensaje para el futuro», el Museo del Prado ha decidido crear una cápsula del tiempo en la que guardarán parte de los materiales creados durante las actividades del Bicentenario, como catálogos, la moneda conmemorativa o el billete de lotería.
Y también los mensajes que los visitantes han querido dejar sobre lo que representa para ellos el Prado y que han depositado en un arca que será conservada en los almacenes del museo junto a las obras.
En estas jornadas de puertas abiertas también se han proyectado una serie de vídeos que repasan los 200 años de vida del museo, un punto final a las celebraciones de esta importante fecha que comenzaron hace más de un año, el 19 de noviembre de 2018.
Estrella Digital