Dos años después de que, en la corrida celebrada en ese ruedo el 29 de septiembre de 2019, las mulillas arrastraran al último ejemplar de Daniel Ruiz, los toros volverán a pisar el famoso albero de la plaza de la Real Maestranza de Sevilla, donde mañana comienza una feria de San Miguel inusual y cargada de atractivos.
Este largo abono se anuncia una vez que la empresa Pagés, adjudicataria del coso por tres generaciones, ya intentara celebrar esta primavera una reducida feria de Abril que fue desautorizada por la Junta de Andalucía, al imponer las más restrictivas medidas sanitarias a nivel estatal frente al aforo del 50% que, junto a un estudiado plan de contingencia, pretendían los organizadores.
Tras aquella polémica decisión, entrados ya en una nueva fase de medidas contra la pandemia y con la autorización de un aforo del 60%, al inicio del verano la empresa decidió sumar las diez corridas que tenía cerradas en abril a las tres de la feria de San Miguel habitual de estas fechas, para ratificar así la vuelta de los toros a una de las «catedrales» del toreo, que nunca, ni durante la Guerra Civil, estuvo tanto tiempo inactiva.
En los carteles destaca especialmente la presencia del diestro sevillano Morante de la Puebla, anunciado en cuatro tardes, incluida la última, cuando, en un gesto muy llamativo, se enfrentará por primera vez en su larga carrera a una corrida del legendario hierro de Miura.
La feria de San Miguel transcurrirá así desde mañana sábado hasta el domingo 3 de octubre, con once corridas de toros, una de rejones y dos novilladas, en las que, además de Morante, se anuncian tres tardes los también sevillanos Pablo Aguado y Juan Ortega, el peruano Roca Rey y José María Manzanares, mientras que en dos ocasiones harán el paseíllo Diego Urdiales, El Juli, Daniel Luque y los extremeños Miguel Ángel Perera y Antonio Ferrera.
Precisamente Ferrera, en un mano a mano con Emilio de Justo, lidiará el día 23 de septiembre la corrida de Victorino Martín, uno de los grandes atractivos «toristas» del abono junto a la de Miura, al ser ambas ganaderías las excepciones a la regla de una lista copada por divisas de sangre Domecq.
Las citas más señaladas por los aficionados, según la demanda en taquilla, son la de mañana -Morante, Roca y Aguado, cartel en principio fijado para el Domingo de Resurrección-, la del día 24 -terna puramente sevillana con Morante, Ortega y Aguado- y las del último fin de semana, que se cierra con los «miuras» que también estoquearán los locales Manuel Escribano y Pepe Moral.
En cuanto a las novilladas, la organización a dado a conocer hoy mismo el único cartel que quedaba pendiente de cerrar, previsto para el 28 de septiembre, y que forman Calerito, Manuel Diosleguarde y Jorge Martínez, con novillos de Rocío de la Cámara.
También en estos días, al bajar la provincia de Sevilla al nivel 1 de emergencia, la Junta de Andalucía ha anunciado que permitirá que los recintos taurinos pasen a ocuparse en un 75 por ciento, pero la empresa Pagés considera que para aplicar este aumento hubiera necesitado más tiempo, de cara a organizar la restringida venta de abonos y localidades que ya lleva varias semanas en marcha.
Según fuentes de la organización consultadas por EFE, sus miembros consideran que «esos cambios no se pueden aplicar de un día para otro. Las ampliaciones de aforo son bienvenidas, pero siempre que haya un margen suficiente de aplicación, no a pocos días de comenzar una feria de esta envergadura», esa que los mismos organizadores han publicitado como «Un San Miguel por todo lo alto».
Paco Aguado