La Guardia civil activó el dispositivo de recuperación del cuerpo a mediodía de hoy tras recibir el aviso de un surfista, que alertó de que había visto un cadáver, que estaba hundido a unos tres metros de profundidad y atrapado por unos bidones.
El servicio marítimo de la Guardia Civil señalizó el lugar con una boya flotante para que los GEAS pudieran rescatarlo.
El cuerpo se encontraba a unos tres metros de profundidad en la playa de Cagailla de Salobreña, y varias patrullas de la Guardia civil, agentes del Servicio Marítimo y Protección Civil de Motril se han desplazado a la zona, donde se ha prohibido el acceso a bañistas.
Redacción