Ayer por la noche se produjo un derrumbe interior en una vivienda del primer piso del número 35 de la calle de Sant Magí que ha obligado a desalojar a las 29 personas que vivían en el inmueble.
Fue sobre las 23.00 horas cuando agentes de la Guardia Urbana y de los Bomberos de la Generalitat intervinieron a raíz de una llamada alertando de la caída de un fragmento del falso techo de la vivienda.
El agujero ha dejado al descubierto una viga principal del edificio en aparente mal estado.
El arquitecto municipal se ha personado en el lugar y ha determinado el desalojo del inmueble.
A lo largo de hoy se hará una revisión en profundidad del edificio para determinar su estado.
El Ayuntamiento de Reus se ha encargado de realojar a los vecinos temporalmente en una pensión de la ciudad, según el protocolo de actuación de la Guardia Urbana y la Concejalía de Bienestar Social, a la espera de conocer si finalmente pueden regresar a sus viviendas o deben encontrar otras donde ser reubicados.
El alcalde de Reus, Carles Pellicer, y el regidor de Seguridad, Joaquim Enrech, se han desplazado al lugar de los hechos para apoyar a los vecinos afectados y conocer la evolución de las tareas de los servicios municipales.
Redacción