Según ha informado este martes en una nota de prensa la Policía Nacional, las gestiones policiales han permitido establecer que probablemente la intención de los arrestados era facilitar una relación sentimental entre el hijo de la detenida y la menor, por lo que la indujeron a abandonar el centro en el que se encontraba, que está tutelado por la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha.
Las gestiones para su localización se iniciaron después de que su desaparición fuera denunciada por una educadora del centro, con el objetivo de evitar que pudiera encontrarse en situación de riesgo o desamparo.
Las educadoras del centro tutelado, con las que la Policía Nacional mantenía un contacto permanente, alertaron de que la menor había enviado una serie de mensajes en los que decía que se encontraba bien y que no quería regresar.
Aún así, los agentes trataron de determinar que se encontraba en el domicilio de la mujer que posteriormente resultó detenida, que cuando los policías se personaron en su casa negó que la menor estuviese allí y aseguró que ni siquiera la conocía.
Sin embargo, unas horas más tarde de esta visita la menor contactó con una educadora mediante una aplicación de mensajería y le comunicó que se encontraba en Puertollano y que no podía regresar al centro aunque deseaba hacerlo.
Tras esta comunicación, los policías volvieron a la vivienda, pero los captores habían decidido trasladar a la menor a otro lugar y liberarla para evitar los problemas que podría ocasionarles el que fuera hallada en su casa.
Finalmente, la menor fue localizada en la estación del AVE por la directora del centro y por una educadora, que la trasladaron al Hospital de Puertollano.
La menor manifestó desde un principio que había sido inducida por la madre y el hijo para abandonar el centro en el que residía e irse con ellos a su domicilio en Puertollano donde había drogas y había sido retenida a la fuerza y la habían amenazado si contaba todo lo ocurrido.
La Policía mantiene la hipótesis de que la intención los detenidos era facilitar la relación sentimental entre la menor y el hijo de la arrestada, pero en la medida en que aumentaron la presión policial y la voluntad de la retenida de abandonar la vivienda decidieron impedirle salir y suministrarle drogas para anular su voluntad y mantenerla en estado continuo de semiinconsciencia.
A los detenidos se les imputan los presuntos delitos de inducción al abandono del domicilio, detención ilegal, contra la salud pública y amenazas.
Estrella Digital