Fuentes judiciales han dicho que el jurado popular ha acordado el veredicto de asesinato con alevosía y ensañamiento por unanimidad, mientras que la relación de parentesco ha sido aprobada por siete votos a dos.
Tras la lectura del veredicto, la Fiscalía ha solicitado que se imponga al acusado una pena de 25 años de prisión, mientras que la defensa, que inicialmente había solicitado la libre absolución, ha pedido que la pena sea de 22 años de cárcel.
El crimen fue cometido el 13 de febrero del 2018 en la vivienda de la víctima, de 44 años, cuando el acusado llevaba unos cuatro meses de relación con ella, según las acusaciones.
Tras el crimen abandonó el lugar y fue interceptado en la localidad malagueña de Marbella gracias al testimonio del hijo de la víctima, que manifestó a los agentes que lo vio salir del domicilio y localizó un reguero de sangre entre el lugar donde estaba el coche y el sitio en el que se encontraba el cuerpo.
El cadáver de la mujer, que se había quedado viuda unos años antes, fue encontrado en el interior de su vivienda.
Al acusado le constan siete denuncias de parejas anteriores y el pasado año fue condenado a seis meses de prisión y dos años sin derecho a tenencia y porte de armas por un delito de malos tratos a una pareja anterior.