Al arrestado se le atribuyen delitos contra la seguridad vial, por conducir de manera temeraria y carecer de licencia, desobediencia a agente de la autoridad y por abandono de menores.
Los hechos tuvieron lugar el 19 de marzo por la tarde, cuando el hombre iba en el coche con su hijo por la A-44 y, a la altura del kilómetro 121 en Peligros, una patrulla de Tráfico le dio el alto en uno de los controles que se hacían en cumplimiento de las medidas adoptadas a raíz de la declaración del estado de alarma.
El conductor no paró, aceleró y uno de los guardias civiles tuvo incluso que apartarse para evitar ser atropellado.
Los agentes salieron detrás del coche fugado y observaron cómo inmediatamente después el vehículo paró un momento en el arcén y se bajaba un menor de edad, para luego seguir con su «alocada carrera» a toda velocidad.
Según la Guardia Civil, fue una maniobra disuasoria para conseguir huir de los agentes, que tuvieron que parar a auxiliar al menor, que no podía quedarse solo en la autovía, lo que permitió al padre conseguir la ventaja suficiente para abandonar la autovía y perderse por las calles de Peligros.
Los investigadores averiguaron que el detenido era la persona que conducía el vehículo y dónde vive actualmente, aunque la dificultad, no obstante, ha sido localizarlo ya que los agentes han tenido de hecho que vigilar el domicilio a diario varias semanas hasta conseguir detenerlo.
El detenido huyó no sólo para evitar que los agentes lo denunciaran por saltarse el confinamiento obligatorio y para eludir ser investigado porque carece de permiso de conducir, ya que no lo ha obtenido nunca.
La Guardia Civil ha puesto al arrestado a disposición judicial y además ha dado cuenta del abandono de su hijo, menor de edad, en la autovía a la Fiscalía de Menores para que actúe en consecuencia.
Estrella Digital