La liberación se concretó a mediados de noviembre y la principal acusada de la retención y la explotación es la tía de la niña, una mujer de 35 años de nacionalidad española, según ha informado este viernes la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Cuando se cometieron los abusos la niña tenía 12 años y los otros arrestados tienen entre 19 y 58 años.
La menor era narcotizada para ejercer la prostitución a cambio de dinero y sustancias estupefacientes, a las cuales se había tornado adicta a causa del continuo suministro por parte de su tía.
Algunas de las relaciones sexuales fueron llevadas a cabo en presencia de un familiar que grababa las escenas y que es investigado también por el posible uso de esos vídeos.
La situación fue denunciada por la hermana de la víctima que hizo entrega del teléfono móvil de la menor y de una sustancia narcotizante que presuntamente estaba siendo suministrada a la víctima por sus parientes.
Los agentes dieron con su paradero, consiguieron liberarla y ponerla a disposición de las entidades de protección de menores.
Para identificar y localizar al familiar implicado se estableció un dispositivo en diversos puntos del distrito de Villaverde, entre ellos narcopisos y puntos negros de consumo y venta de droga.
Finalmente los investigadores lograron localizar y arrestar a la principal responsable de las explotaciones sexuales.
Las pesquisas permitieron averiguar la identidad de otras doce personas, algunas de ellas clientes que eran conseguidos por parte de la familia de la menor para mantener relaciones sexuales a cambio de dinero y sustancias estupefacientes.
Los trece arrestados pasaron a disposición de la autoridad judicial como presuntos responsables de delitos de corrupción de menores, de abuso sexual a menor de 16 años, de provocación sexual y contra la salud pública.
La operación continúa abierta ya que no se descartan más detenciones. EFE
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M.M.