El director general de la Policía, Pere Ferrer, y el portavoz de los Mossos d’Esquadra, el comisario Joan Carles Molinero, han comparecido este jueves en rueda de prensa para hacer balance de la segunda noches de altercados, que han tenido su epicentro en Barcelona, Lleida y Girona y, en menor medida, en Tarragona.
En concreto, han sido detenidas un total de 33 personas por los delitos de desórdenes públicos, atentado a agente de la autoridad, daños materiales o robo con fuerza, entre otros: de estas, 12 personas fueron detenidas en Barcelona, 14 en Lleida, 5 en Girona y 2, en Tarragona.
Además, 14 personas resultaron heridas y requirieron asistencia por parte del Sistema de Emergencias Médicas (SEM), de las cuales 10 tuvieron lugar en la capital catalana, donde resultaron lesionados 6 agentes de los Mossos d’Esquadra, así como otros 2 policías, uno en Girona y otro en Lleida.
Al margen de las cifras de detenidos y heridos, la noche terminó con 135 contenedores quemados, al igual que 9 coches, mientras que otros 3 vehículos sufrieron daños considerables.
También se han contabilizado cuantiosos daños en numerosos comercios, entre ellos un concesionario de coches en el distrito del Eixample de Barcelona, además del intento de acceder al edificio de la Bolsa, que fue repelido por los antidisturbios.
Ferrer y Molinero han expresado su «preocupación» por estos actos de «extrema violencia«, protagonizados por grupos «muy violentos» que aprovechan manifestaciones multitudinarias para «infiltrarse» y provocar disturbios de «alta complejidad» para la policía, y a los que se suman los «oportunistas», que no tienen nada que ver con el motivo de la protesta y que se dedican a «saquear» establecimientos comerciales.
«No podemos normalizar el derecho legítimo a la protesta con el uso de la violencia, que en ningún caso podemos tolerar«, ha dicho Ferrer, quien ha constatado que lo que se ha vivido en las últimas dos noches «no es normal».
En cuanto al perfil de estos alborotadores, han precisado que se trata de una «amalgama» de personas «violentas y agresivas», de diversas características y edades. EFE
A.M.