Cuando los agentes llegaron al establecimiento, que tenía la persiana medio bajada, había música en su interior, personas consumiendo bebidas y fumando, sin ni respetar las distancias de seguridad y sin usar mascarilla.
El propio establecimiento dejó constancia de la fiesta en su cuenta de Instagram, donde colgó vídeos de la celebración, tal como se desprende de un enlace remitido a los medios por el consistorio.
Además de denunciar a las 58 personas que había en el interior, la policía también levantó cinco actas por no acreditar la licencia municipal del local, el seguro de responsabilidad obligatoria ni el permiso para disponer de billar, además de por no haber realizado la revisión periódica de los extintores ni la inspección del establecimiento.
Los responsables del bar cuentan con varios antecedentes administrativos y policiales y se exponen a una sanción de entre 60.001 y 600.000 euros por incumplir las restricciones de la covid-19 y la Ley de Salud. EFE
A.M.