En una sentencia de conformidad, a la que ha tenido acceso Efe, el tribunal considera a esta persona responsable de un delito abusos sexuales por el que además de la pena de cárcel le impone la prohibición de aproximarse a menos de 250 metros y a comunicar con ella por un período de cuatro años, además de libertad vigilada durante 5 años.
En concepto de responsabilidad civil, debe indemnizar a la menor en la cantidad de 1.000 euros por los daños morales.
El tribunal concede al condenado el beneficio de la suspensión de la ejecución de la pena privativa de libertad por plazo de dos años condicionada a que no vuelva a delinquir en ese período.
Se considera probado que durante los periodos lectivos de los años 2016 a 2018, la madre de la menor, mientras se iba a trabajar al campo, la dejaba en casa de una vecina, donde esta residía con su familia y en la que vivía también el acusado.
Allí, en fecha no determinada, pero en todo caso durante el año 2017, el acusado, movido por un ánimo lúbrico, aprovechando que la menor estaba durmiendo en una de las habitaciones del domicilio familiar, entró en la estancia y tras acostarse al lado de la menor, le metió la mano por dentro de la ropa, llegando a tocarle la zona genital, para posteriormente darle un beso en la boca. EFE
M.M.