La investigación comenzó hace más de un año cuando los policías descubrieron que un hombre estaba utilizando identidades falsas para realizar reintegros en cajeros automáticos de forma fraudulenta.
Según ha informado este viernes la Policía Nacional, las pesquisas permitieron conocer que este individuo formaba parte de un entramado criminal dedicado a este tipo de estafa.
Los miembros de la banda conseguían los datos de las víctimas cuando accedían a la supuesta página de su banco, que le remitía a la instalación de un módulo de seguridad que les requería una clave; seguidamente la pantalla se bloqueaba.
En solo unos instantes los estafados comprobaban que se habían realizado transferencias desde sus cuentas de cantidades que oscilaban entre los 2.500 y 20.000 euros a las cuentas de otros implicados en el grupo, las denominadas como «mulas».
Estas personas ofrecían sus cuentas personales para recibir estas transferencias o abrían cuentas nuevas con identidades falsas o usurpadas.
Posteriormente, otros miembros de la organización acudían a cajeros para extraer ese dinero en efectivo hasta agotar el límite de extracción.
En ocasiones, compraban criptomonedas o lo transferían a tarjetas monedero. Se da el caso de que en una de estas tarjetas llegaron a acumular más de 90.000 euros.
Los investigadores lograron detener a los cuatro líderes de este grupo criminal y a otras 90 personas, muchas de ellas «mulas».
El grupo residía y realizaba su actividad desde el pasado año en la Comunidad de Madrid, pero sus víctimas estaban repartidas por todo el territorio, ya que los envíos de spam para estafar por el método «phishing» se realizaban de manera indiscriminada.
Los agentes practicaron cuatro entradas y registros en la localidad madrileña de Parla y en la capital donde los investigadores intervinieron documentos de identidad falsos para abrir cuentas bancarias, tarjetas bancarias de «mulas» y de identidades usurpadas, resguardos de compra de criptomonedas por importe de 26.000 euros y claves de cuentas bancarias.
La Policía informa de que la investigación continúa abierta por lo que no se descarta la implicación de más personas en el entramado criminal y la localización de más víctimas. EFE
M.M.