Según informa el Instituto Armado, los hechos fueron denunciados la semana pasada desde el ayuntamiento de esta localidad a través de una llamada en la que informaba de que agentes de la policía local habían recogido el 22 de noviembre a una perra mestiza de color marrón en mal estado en las proximidades del tanatorio municipal.
Dado el estado de miedo que mostraba y la gravedad de las heridas, el animal, que no portaba chip identificativo, tuvo que ser anestesiado por el veterinario de la localidad para facilitar su captura y posterior traslado a una clínica veterinaria.
En el informe emitido por los servicios veterinarios del Área Técnica de la Dirección General de Derechos de los Animales del Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030, que se trasladaron el 9 de diciembre a Utebo a petición de las autoridades municipales, se hacía constar la existencia de diversas heridas en el animal.
En concreto, fueron detectadas heridas inciso contusas en hocico, región derecha de la cara, hemorragia en el ojo derecho, falta de un premolar y heridas en la pata anterior derecha y muslo posterior izquierdo, todas ellas compatibles con un presunto delito de maltrato animal y causadas con un objeto romo.
Igualmente, los servicios veterinarios constataron que el conjunto de lesiones que presentaba en la cabeza la perra le habían ocasionado un grave menoscabo de su salud.
Las pesquisas llevadas a cabo por la Guardia Civil de la localidad permitieron la identificación y posterior detención, el pasado día 8, del presunto autor del maltrato.
En sus declaraciones ante los agentes, el detenido dijo que había golpeado a la perra tras mantener una discusión con su pareja, y que posteriormente la había abandonado a su suerte. EFE
A.M.