La Guardia Civil ha detenido a casi una treintena de personas en una operación contra una red de narcotraficantes dirigida por Jesús Heredia Heredia, el Pantoja, uno de los principales «capos» del tráfico de hachís en el Campo de Gibraltar, que también ha sido apresado.
Unos 300 agentes de la Guardia Civil se han desplegado a las seis de la mañana para desmantelar una nueva rama de la organización liderada por el Pantoja, cuyo clan se asienta en Algeciras, pero que ahora operaba en la comarca de La Janda para introducir hachís por la costa gaditana.
La red se dedicaba también a surtir de combustible a narcolanchas de otras organizaciones dedicadas al tráfico de droga.
Los investigadores han intervenido más de 3,5 toneladas de hachís a este entramado, la redada de este miércoles, en la que han llevado a cabo 39 registros en inmuebles de la provincia, en su mayoría en la comarca de La Janda: diez en Chiclana, ocho en Medina Sidonia, cinco en Barbate y trece en Vejer de la Frontera, donde ha sido apresado el «lugarteniente» del Pantoja.
También ha habido otros tres registros en Algeciras, en uno de los cuales ha sido nuevamente detenido Jesús Heredia, el Pantoja, que estaba en libertad provisional y ha sido conducido a los calabozos de la Comandancia de la Guardia Civil de Cádiz.
En los registros han sido incautadas dos armas de fuego, 170.000 euros, seis embarcaciones y ocho vehículos, así como garrafas de gasolina. El operativo, en el que han participado agentes de las comisarías de Cádiz y Algeciras, así como del Órgano de Coordinación contra el Narcotráfico (OCON-Sur), el Centro Regional de Análisis e Inteligencia contra el Narcotráfico (CRAIN), el Grupo de Acción Rápida (GAR) y el Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) de la Guardia Civil, obedece a una investigación coordinada por el juzgado de instrucción número 2 de Chiclana de la Frontera.
Con esta detención, el Pantoja, que hasta ahora sólo tiene antecedentes penales por delitos contra la Seguridad Vial, suma una cuarta investigación por su relación con el tráfico de hachís, al que, según fuentes policiales, se dedica desde la adolescencia.
Se inició haciendo labores de vigilancia y logística para Abdellah El Haj, el Messi del hachís, y fue escalando puestos y ganándose su confianza hasta convertirse en su mano derecha, según las fuentes.
Cuando El Messi, que continúa huido de la Justicia español, necesitó pasar a un segundo plano, el Pantoja le sucedió y se convirtió en uno de los narcos más activos del Campo de Gibraltar.
De hecho cuando el 24 de mayo de 2020 fue detenido mientras estaba con su familia en un restaurante de una zona de lujo de Chiclana de la Frontera, la Policía le definió como la persona que controlaba la práctica totalidad del transporte de hachís desde Marruecos a Cádiz.
Su arresto se produjo un mes después de que escapara a una redada en la que fueron detenidos 36 integrantes de su clan y en la que se intervinieron 4,3 toneladas de hachís.
El primer juicio en el que se le acusa como narcotraficante ha sido suspendido dos veces consecutivas, el 27 de septiembre y el 1 de febrero.
La Fiscalía Antidroga pide para él en este sumario trece años de prisión y doce millones de euros de multa.
Tiene además otras dos causas pendientes por las que también estaba en libertad provisional. Una de ellas le sitúa como el líder de una red que usaba pesqueros para trasladar alijos de hachís, como el Rúa Mar, que el 23 de enero de 2020 se hundió con sus seis tripulantes y los 2.000 kilos de droga que llevaba a bordo.
Y en la otra, se le acusa de blanqueo de capitales, como propietario de unas de las parcelas de la urbanización «Villa Narco», ubicada en la zona de El Zabal de La Línea de La Concepción.
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