Así figura en el informe que, según la familia de Déborah, acaba de remitir el Instituto Nacional de Toxicología.
Ahora, los abogados de la familia solicitarán la ampliación de la prueba pericial para intentar determinar los marcadores genéticos hallados.
En cuanto al pelo que dijeron los forenses de Vigo haber encontrado durante la exhumación, tras el examen, el instituto de toxicología ha determinado que se trata de PVDC, un material empleado para el envasado de alimentos, entre otros usos, lo que, según expresa la familia en un comunicado, “demuestra una vez más la negligencia de la autopsia inicial”.
En cuanto al examen del vehículo del principal sospechoso, efectuado en septiembre del pasado año, se hallaron gran cantidad de muestras biológicas tanto humanas como animales, “lo que choca frontalmente con que en el examen del 2010 no se encontrase absolutamente nada, lo que demostraría que en el 2010 se hizo una limpieza exhaustiva del vehículo”.
Pasado mañana, viernes, la persona a quien la Policía señaló como principal sospechoso del caso, que había sido novio de Déborah, declarará por primera vez en calidad de investigado tras ser citado el pasado 11 de febrero por el juzgado de Instrucción 2 de Tui.
El juzgado se había negado a citarlo a declarar pero la familia presentó un recurso ante la Audiencia Provincial de Pontevedra que fue estimado.
La declaración se decretó en principio para el pasado 21 de febrero, pero fue pospuesta para dar tiempo a los abogados de estudiar la causa.
La citación del principal sospechoso paraliza el plazo de prescripción del caso, al que le quedaban dos meses escasos de vida cuando llegó la autorización para citar al principal sospechoso. EFE
A.M.