Sin embargo, el principal presunto agresor, a quien todos identificaban como quien asestó las puñaladas a la víctima y azuzó al perro para que le mordiera, según la investigación, cogió un vuelo con destino a Londres al día siguiente del suceso, por lo que continúa pendiente su detención.
La víctima fue operada de urgencia en el Hospital General de Alicante por las lesiones producidas en la cara, han informado este jueves fuentes policiales.
Los tres arrestados, de entre 17 y 26 años, de nacionalidades española y rumana, declararon en dependencias policiales, tras lo cual el menor y otro de los sospechosos quedaron en libertad, a la espera de ser citados para comparecer en sede judicial, mientras que el tercero fue puesto a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Elche.
Los hechos ocurrieron el pasado 27 de marzo en un parque del barrio de Carrús de la localidad ilicitana donde, al parecer, dos varones habían quedado para resolver una disputa anterior, según manifestaron los testigos y la propia víctima.
Cuando ésta llegó al lugar, junto con tres amigos, vio allí a la persona con la que había quedado para resolver el problema, quien estaba acompañada de al menos veinte individuos más.
En un momento dado, y sin mediar palabra alguna, uno de estos individuos le propinó lo que los testigos identificaron como un fuerte golpe en el rostro a su amigo, quien cayó al suelo sangrándole la cara abundantemente. Posteriormente se pudo saber que este golpe había sido una agresión con un arma blanca.
Los agresores, aprovechando este momento de indefensión de la víctima, le clavaron un punzón en el glúteo. Además, tres de ellos le patearon y le propinaron puñetazos en la cabeza.
Los acompañantes de la víctima intentaron auxiliarle. Sin embargo, dos de los agresores le mostraron las armas blancas que portaban, haciéndoles retroceder inmediatamente, mientras continuaban golpeando al joven.
Uno de los presuntos autores, el varón con el que la víctima supuestamente había quedado para solucionar la cuita que tenían pendiente, azuzó al pitbull que lo acompañaba. El perro llegó a morder el glúteo al joven.
Tras la «brutal paliza», los agresores huyeron del lugar rápidamente, dejando al joven tendido en el suelo y sangrando abundantemente. Sus amigos lo recogieron y lo llevaron en un vehículo hasta el Hospital General de Elche, desde donde le tuvieron que trasladar al General de Alicante debido a que tenía que recibir cirugía maxilofacial de urgencia a causa de la herida producida en la cara. EFE
A.M.