Comienza el juicio hoy, a un hombre que mató a su tío, se enfrenta a una condena de 12 años de cárcel por homicidio. Él mismo, un día después del crimen, confesó a la Policía Local ser el autor de los hechos colaborando en la reconstrucción de los mismos. Por lo que, la Fiscalía considera como atenuante la confesión.
Se solicita también una medida de libertad vigilada por ocho años e indemnizaciones de 80.000 euros para cada uno de los hijos de la víctima y de 40.000 euros para su hermano.
El crimen ocurrió el 23 de febrero de 2021. La víctima era hermano del padrastro del acusado y vivían juntos en Inca.
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Por lo declarado en el juicio, se inició una discusión entre ambos en la vivienda cuando agarró al anciano fuertemente por la nuca con una mano mientras que con la otra le tapó la boca y la nariz haciendo presión, al tiempo que le decía «cállate, cállate».
Después lo arrastró hasta la cama, donde siguió presionando mientras la víctima trataba de defenderse, hasta que finalmente, le provocó la muerte por asfixia.
A continuación sacó dinero en un cajero y salió a hacer la compra, estando ya el tío fallecido en casa. Fue al día siguiente cuando el homicida llamó a la Policía Local de Inca confesándolo todo. «Mire… eh… Le llamo, es que tuve una discusión con mi tío, perdí los papeles y lo he matado», dijo en la llamada.
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Tras esto esperó en la vivienda a que llegaran los agentes, y la Guardia Civil se hizo cargo de la investigación, desde entonces se encuentra en prisión provisional.