El país todavía no sabe si saldrá de la crisis al término de este año. RTVE, no. Después de acumular unas pérdidas de 226 millones en los últimos dos años, la Corporación estima que al término de éste esa cifra se habrá aumentado en unos 40 millones de euros, el déficit que prevé para este ejercicio.
Curiosamente, cinco millones menos de esa cifra es lo que va a pagar el ente público por emitir los partidos de la selección española de fútbol, después de haber ganado la puja por esos derechos tras ofrecer mucho más dinero que las cadenas privadas. Sin 'La Roja', quizás sí le hubieran cuadrado las cuentas.
Pese a todo, su presidente Leopoldo González Echenique precisaba hace pocas fechas que «ofrecer los partidos de la selección española entra dentro de su misión de servicio público», así como que «es lícito pujar por los partidos de fútbol. Lo que no es lícito es sobrepujar, y eso no lo estamos haciendo».
Las privadas han puesto el grito en el cielo por esa puja de RTVE, sobre todo teniendo en cuenta que, a diferencia de ellas, la pública no puede recuperar nada de ese dinero invertido al no contar con publicidad.
Además, las cuentas podrían ser hasta más negativas ya que desde el grupo socialista acusan a RTVE de haber creado un «déficit estructural» de cien millones, lo que significa que cada año la desviación presupuestaria se situaría entorno a esa cantidad.
Para evitalo, Leopolodo González-Echenique ha ofrecido una serie de medidas, como modificar el modelo de financiación, algo que afectaría directamente a las empresas de telecomunicaciones, al no estar del todo clara la base sobre la que se calcula la tasa otorgada a la Corporación.