Por mucho que se haya apuntado un tanto al ser la primera presentadora que ha conseguido sentar en un plató de televisión a Javier Limón, marido de Teresa Romero, la enfermera que estuvo contagiada de ébola, lo único que ha conseguido Mariló Montero este miércoles en su programa es que la volvieran a llover las críticas en las redes sociales.
Su insistencia en defender la labor del Gobierno en todo el proceso y de intentar que su invitado no continuara con su idea de llevar a los tribunales la forma en la que aquel había tratado el asunto, ha vuelto a suscitar polémica.
En la charla que han mantenido en directo, la presentadora ha opinado que «es feo judicializar este caso ya que el Ministerio ha frenado una expansión del ébola en España», no comprendiendo los motivos que tenía su invitado para demandar al consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, una vez que su mujer se había recuperado.
Según ella, «el Ministerio ha trabajado a destajo, al igual que el hospital…¿Todo eso no compensa para vivir ya en paz?«. Lo de no continuar con sus protestas lo justificó en el hecho de que «esto es un ejemplo a nivel mundial, se le ha salvado la vida y ni Estados Unidos está como España, que aquí está controlado y protocolarizado».
A pesar de la insistencia de Mariló, el marido de Teresa señaló que «a mí mujer se le ha faltado al respeto«, subrayó que «aquí parece que con pedir perdón está todo solucionado» y puntualizó que el consejero acudió al hospital pero no le quiso recibir: «¿Por qué no recibió a una persona que le ofrecía de nuevo su perdón?».
Sobre el estado de Teresa Romero, Limón ha explicado que «ahora está muy enfadada porque aún no han desinfectado la casa», y dijo no explicarse cómo «para matar a Excalibur han corrido mucho pero ahora ya no».