Iker Jiménez ha 'armado el belén' -nunca mejor dicho- por opinar en las redes sociales sobre la conveniencia de ubicar belenes en Madrid. «Ahora resulta que poner un belén en Madrid es de fachas», ha afirmado el periodista en su videoblog. De sobra es conocido que todo lo que tenga que ver con la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, y sus decisiones levantan una tremenda polvareda, por lo que el periodista sabía que se exponía a un aluvión de comentarios en las redes que no ha tardado en llegar.
El conductor de 'Cuarto Milenio' se ha granjeado la antipatía de muchos ususarios por su comentario sobre los belenes y denunciar las campañas de linchamiento en las redes sociales a todo aquel que disiente de lo políticamente correcto. Jiménez salió en defensa de la iniciativa de su compañero de programa, el doctor José Miguel Gaona, de instalar por su cuenta un pequeño belén en la Puerta de Alcalá y lamentó los ataques que ha recibido en las redes por esta decisión. Hasta que llegó Carmena a la alcaldía era una tradición instalar un nacimiento grande en esta emblemática zona de la capital.
Por fin la Puerta de Alcalá tiene su Belén. Pequeño en tamaño pero grande en significado @findesemanacope#Navidad pic.twitter.com/uViI3f4ci0
— José Miguel Gaona (@doctorgaona) 3 de diciembre de 2016
Jiménez considera que la iniciativa del doctor Gaona es «lógica» en un país como España, con «una raíz cristiana tan importante». «Nuestro pueblo tiene en los últimos siglos esa creencia dentro de su genética», defiende el periodista, que no logra entender por qué alguien pueda sentirse ofendido más allá de las creencias particulares de cada uno.
Pero el popular presentador de televisión ha ido más allá al considerar que ciertos políticos con sus decisiones «quieren borregos que no discutan». «O haces todo lo que a la mayoría le gusta, o te estigmatiza (…) Como te salgas del rebaño, estigmatizado«, lamenta.
Jiménez continuó con su reflexión, identificando a su compañero con la fugura de El Quijote. «Lo que representa: ese español genuino contra los molinos, contra todo. Gaona es un poco Quijjote: pone su belén, y lo hermoso es que muchísima gente le sigue en el gesto, incluso niños con dibujos. ¿Por qué tenemos que renunciar a lo que somos, al tronco cultural de lo que somos?».
Por todo ello, pidió que se disculparan a todos los que arremetieron contra Gaona por decir lo que piensa y sufrir una campaña de acoso mediático y de redes sociales «¿En qué sociedad estamos? ¿Qué vale la palabra? Tú dices la palabra porque estas de acuerdo con algo, ¿y al día siguiente estás sollozando porque te ha venido la avalancha, a veces perfectamente programada?».
Ya, por último, Jiménez volvió a defender el gesto del belén porque es «muy auténtico y merece ser aplaudido», no sin antes volver a recordar que «la gente está harta de lo que nos venden, de la falsedad, de la máscara de vida, pero no queriendo combatirlas porque sabe que se pone en el patíbulo de los herejes».
Pese a las críticas de muchos usuarios, Jiménez también se ha encontrado con el apoyo de otros muchos, entre ellos el de Santiago Abascal, presidente de VOX.
Bravo por Iker Jiménez que últimamente arma el Belén cada dos por tres al querer hablar con libertad https://t.co/kPuoGEJvr0
— Santiago Abascal (@Santi_ABASCAL) 8 de diciembre de 2016
Saúl Briz