Lo suyo es una labor de acoso y derribo. Sabía muy bien por qué la habían contratado, por qué había entrado en la casa, y a fe que Aída Nízar está cumpliendo con todo. Después de lo de su denuncia sobre la agresión de la que había sido víctima, ahora vuelve a cobrar protagonismo después de sus comentarios homófobos.
Al parecer, a la vallisoletana ni le ponen ni disfruta viendo las caricias y arrumacos de dos mujeres entre sí, y por eso le tiene fuera de sí la relación que mantienen Elettra Lamborghini y Daniela Blume, y así lo dejó patente en una conversación que mantuvo con Alenjadro Abad.
El compositor también tuvo parte de culpa, ya que fue el que comenzó a comentar esta veaz la actitud cariñosa que tenían sus compañeras de convivencia, «no sé qué se estaban tocando», algo que provocó la sonrisa de Aída, que apostilló «¡Qué asco! ¿Pero qué es esto?».
Eso sí, ninguno de los dos se atrevió a hablar de ello delante de la pareja, ya que Alejandro Abad, en cuanto vio que llegaba Daniela Blume le avisó a Aída, que antes de que llegara todavía murmuró un «incomprensible», antes de cambiar de tema al vera.
Claro que ni Elettra ni Daniela son las únicas 'víctimas' de Aída, ya que ésta también ha logrado desestabiliza a Alyson Eckmann. La estadounidense no oculta su malestar ante la presencia de aquella, y pese a los consejos de sus amigos en la casa, ha acabado por perder los papeles.
Por ese motivo, Eckmann hizo ademán de escupir a la nueva concursante durante la última fiesta noctura en Guadalix y ha estado a punto de decir adiós al reality, ya que la organización no pasa por ahí y le ha hecho saber a la expresentadora de Hable con ellas que, de persistir en su actitud, se enfrentaría a una expulsión disciplinaria.
M. A.