Una vez más, las apariencias engañan. Eso más o menos vino a decir este fin de semana David Bustamante en el programa de María Teresa Campos ¡Qué tiempo tan feliz!, en el que no sólo habló de la relación con su pareja, Paula Echevarría, con su hija Daniela, o de su paso por la primera edición de Operación Triunfo sino también de su situación personal, del estado anímico en el que se encuentra.
En este sentido, primero recordó que «cuando tienes 19 años, por mucho que te creas un hombretón porque llevas trabajando desde los 15, no tienes capacidad de nada. Eres un auténtico crío. Nadie está preparado», y después confesó que a veces sigue necesitando la ayuda de un terapeuta.
Según él, pese a que la gente pueda pensar que él lleva una vida perfecta junto a Paula Echevarría no todo es como parece y por eso siempre necesitas ayuda: «Tienes que desahogarte y encontrar herramientas para afrontar los problemas. La vida es complicada y hay que hablar para no guardarse nada».
Respecto al programa que le hizo famoso, Bustamante también hizo una revelación de algo que no se sabía, «muchas veces pensé en marcharme. Tenía ataques de ansiedad». Era esa época tan difícil en la que tenía los citados diecinueve años y en la que era conocido no sólo por su voz sino por derramar lágrimas en cada entrega de Operación Triunfo.
Pese a todo, el artista de San Vicente de la Barquera se mostró feliz por todo lo que ha logrado y por la familia que tiene, dejando claro lo mucho que quiere a su hija, «hemos hecho tan bien a Daniela que hemos roto el molde». Por ese motivo volvió a reiterar que parece muy complicado que aquella tenga más hermanos porque «ni Daniela quiere hermanos ni a Paula le apetece, así que no vamos a tener más hijos».
Sobre su carrera como cantante le indicó a María Teresa Campos sus intenciones de sacar próximamente una canción muy distinta a las que ha hecho hasta ahora, «la voy a sacar en solitario y además va a sorprender mucho porque no tiene nada que ver con lo que he estado haciendo ahora. Sabéis que siempre me gusta experimentar y jugar con la música, así que dentro de poco habrá sorpresita».
M. A.