La soledad es muy mala, y más aún si encima fuera de la casa tienes graves problemas personales, como los que le ha comentado la dirección de Gran Hermano por culpa de su conflicto con Pepe Navarro, el que ahora ya no es supuestamente el padre de su hijo. Eso es lo que ha debido pensar Yvonne Reyes, que parece dispuesta a, cuando menos, dormir calentita lo que le quede de convivencia en Gran Hermano VIP.
Por ese motivo es quizás por el que ha decidido acercarse más de la cuenta a Sergio Ayala, el concejal del PP que participó en Mujeres y Hombres y Viceversa y que ya demostró desde el primer momento que de liarse con alguna compañera dentro de su nuevo hogar de Guadalix sería con la venezolana.
Así las cosas, en los últimos ambos se han mostrado más cariñosos entre sí de lo normal, y los seguidores del programa ya cruzan apuestas sobre cuándo se producirá el beso en la boca entre ambos, por mucho que ella indicara que «estamos de cachondeíto, con miraditas… Es muy lindo, está muy pendiente, es muy detallista».
Eso al menos es lo que Ivonne Reyes le comentó a Aída Nízar, ante las insistentes preguntas de ésta sobre cómo iba esa relación, sobre todo después de que la propia Ivonne manifestara sus celos hacia Daniela, por el beso que el político le había dado a la argentina en el jacuzzi de la casa.
Tal era su malestar que incluso se lo hizo saber al propio Sergio, al que le preguntó si «¿eran los mismos besos estos que los del jacuzzi?», después de que él aparentemente le besara en los labios. La respuesta del político al menos parece que la satisfizo, «no, los tuyos son especiales».
Pese a que la relación va viento en popa, parece que la misma está condenada al fracaso, ya que la venezolana le confesaba también a Álex Gibaja que tiene a alguien esperándole fuera de la casa, «el me dijo que entrara aquí y que esperaba que no encontrara a nadie aquí. Debe estar…». Sin embargo, esas lamentaciones no la impidieron luego compartir cama durante toda la noche con Sergio.
M. A.