Y luego algunos le piden peras al olmo, y critican que 'escritores' como Belén Esteban diga barbaridades en televisión. Qué se puede esperar de gente así si otros mucho más cultos, supuestamente, como Javier Sardá, pueden decir otras aún más grandes como que 'Platero y yo', una de las obras inmortales de Juan Ramón Jiménez, es de Azorín.
Sí, puede parecer mentira, sobre todo cuando se ha ido precisamente a El Hormiguero para presentar su último libro, 'Una historia de la mala leche', pero el catalán llegó en un momento de la entrevista a decir que «a Azorín le decían que su 'Platero y yo' era un desastre y el burro era una merde».
Como era de esperar, a los pocos minutos ya le estaban poniendo a caldo las redes sociales, en las que se obviaba todo lo que hubiera podido decir durante el resto del programa. Su 'lapsus' le hizo por unas horas ser tan popular como cuando presentaba sus recordadas Crónicas Marcianas.
Curiosamente, Sardá había hecho mención minutos antes a la supuesta 'impunidad' que da Twitter a la hora de insultar, y criticó tanto los injustificables ataques había recibido la familia de Bimba Bosé tras la muerte de la modelo y cantante, «es mentira que en España no hay extrema derecha, están, agazapados, pero están, soltando imbecilidades», como comentarios como «no pasa nada, eran catalanes», en referencia a la tragedia de Germanwings, «¿la gente dice a sus amigos y familia que ha escrito o eso o se lo callan, como el porno?».
El presentador también se refirió a los ataques que ha tenido que sufrir a lo largo de su vida, «soy crítico con algunas fuerzas del proceso soberanista, y durante años hacía un programa políticamente incorrecto, y la gente me decía: Catalán, vete a tu tierra. Y en Cataluña me dicen: vete a España. Decían que era un rojo de mierda y un españolista de mierda. El resumen es que eres una mierda».
Eso no quitó para que diera su opinión del tema soberanista, «me gustaría que no me angustiase tanto. Si en Cataluña están diciendo que van a convocar un referéndum, y en España dicen que no, esto genera tensión. Me gustaría que esto estuviera solucionado, sea con independencia o sin ella», y hasta del último congreso de Podemos, «en Vistalegre hablaban de unidad, pero han puesto a Errejón atrás, al lado del del pañuelo palestino».
A diferencia de cuando visitó su plató la tonadillera Isabel Pantoja, no debió encontrarse muy cómodo Sardá en El Hormiguero, ya que durante un momento dijo «lo que hay que hacer para vender libros».
M. A.