-Mientras en las redes la tachan de 'proetarra' usted es policía en la ficción. ¿Ha tenido que aprender algunos truquitos?
-Sí, la verdad es que he tenido que aprender cómo se lleva un arma, cómo se carga, cómo se apunta y se dispara. Hubo un curso previo para que pudiera ser creíble el personaje. Además he intentado ver algunas películas, como 'El silencio de los corderos' para ver cómo se desenvuelve una mujer policía en un mundo mayoritariamente de hombres.
-¿Como actúa su personaje es como podría actuar cualquier inspectora de policía en un caso similar?
-No lo sé, pero ese taconazo que llevaba al principio no sé si una policía los llevaría en una crisis con rehenes, en la que a lo mejor tienen que salir corriendo, pero creo que habrá buenas negociadoras, muy psicólogas, muy empáticas, cuya prioridad sea que no haya ningún herido o muerto y que todo se solvente bien, deteniendo a los malos.
-¿Pero los malos son los malos o son los buenos en esta serie?
-Todos somos humanos, y eso se ve. Creo que lo más interesante en la serie es que muestra que todo el mundo tiene su lado humano y su punto de vista de la vida, porque hay mucha metáfora, igual que mucho humor y se ven las relaciones, el factor humano, que es lo que más me ha gustado.
-¿Después de ver los primeros capítulos esperaba que fueran así o han superado incluso sus previsiones?
-Me han gustado mucho. Cuando leí el guión me enganchó mucho pero sé que muchas veces de lo escrito a lo que se ve en imágenes puede variar mucho, unas veces para mejor y otras para peor. Para mí esto ha superado mis expectativas. Cuando ves el resultado del equipo en conjunto…
-¿El que en un principio se hablara de 18 o 20 capítulos quería decir que había plena confianza en que la audiencia respondiera como ha respondido?
-No lo sé, pero me imagino que sí. Son muchos, pero al principio se habló de 15 y luego fueron subiendo. No conocía la productora, he venido de Vizcaya y soy un poco nueva en esto.
-¿Cree que hay mucha diferencia entre esta primera serie de ladrones con una película sobre el mismo tema?
-Una serie tiene una parte que te engancha pero también hay que hacerlo muy bien, y para eso estamos trabajando como en el cine, se cuida mucho la luz, la parte de arte… Es un esfuerzo muy grande por parte de todos y hay que llevar constantemente ese ritmo, y el guión también.
-Hace poco la veíamos en 'Cuéntame cómo pasó', ahora en 'La casa de papel'… ¿Se está aficionando a las cadenas generalistas?
-He tenido suerte, sin más. Hay veces que suena la flauta y te cogen mucho y otras no. Eso lo sabemos muy bien los actores y actrices y cuando vienen las vacas gordas hay que aprovechar para cuando vengan las flacas porque todo sube como la espuma y baja, y eso yo ya me lo sé. Es difícil tener una lanzadera directa hacia la Luna y hay que estar más con pico y pala trabajando.
-¿El trabajo de 'La casa de papel' le salió por su labor en 'Cuéntame'?
-No, más por la serie de la ETB 'Loreak', porque me avisaron un poquito antes de que empezaran a emitirla. He tenido mucha suerte.
-¿Para una actriz es mejor una serie como la que estaba en el País Vasco, en la que estuvo tanto tiempo, o un proyecto como el de 'La casa de papel', aunque no garantice tanto tiempo de trabajo?
-La verdad es que hacer una serie de tanta calidad es como tener una perla, es una suerte muy grande y me acabo de dar cuenta ahora de la suerte que he tenido. La otra era en casa, con gente conocida, y me daba otra tranquilidad. Lo de Antena 3 me ha supuesto abandonar mi casa de allí, venir a Madrid… pero he visto el resultado y ha merecido la pena.
-¿Se va a quedar ya en Madrid?
-No, andaré yendo y viniendo. Allí tengo mi gente, mi familia, a mi amatxu, y eso tira mucho. Aparte del trabajo, que es muy importante, la vida también lo es.
-¿Cuál será su próximo proyecto?
-Tengo dos obras de teatro en el País Vasco y cuando tengo un bolo voy para allá y vengo luego. Gracias a Dios no me puedo quejar de teatro.
M. Arroyo