A falta de noticias importantes, el populacho se conforma en verano con cosas como las transparencias de María Lapiedra en Supervivientes: Conexión Honduras, que parece que van a dar más juego que si hubiera aparecido desnuda completamente en ese plató.
Su aparición el pasado domingo con una blusa en la que se le veían claramente sus pechos, sin sujetador ni pezoneras de por medio, provocó que Lydia Lozano parara el programa para hablar de su vestimenta y que Sandra Barenda, la presentadora, quisiera echarla del plató.
Por ese motivo, la exactriz porno, ahora metida a escritora, cantante erótica y colaboradora de programas de TV, a la espera de poder participar en la edición del próximo año en Supervivientes, para la que ya está confirmada, ha querido dar su versión sobre el asunto.
Así, en una carta enviada en exclusiva a EL CONFITV, ha lamentado que «una vez más vuelvo a ser noticia por mi cuerpo. Vuelvo a ocupar titulares en la gran mayoría de medios de comunicación especializados (o no) en televisión», algo que dice no entender porque «sinceramente, que en pleno siglo XXI haya gente que se lleve las manos a la cabeza por llevar un vestido con transparencias que deje parte de mi anatomía al descubierto, me sigue, cuanto menos, sorprendiendo«.
María Lapiedra se define como «una mujer libre, adulta, sin complejos», y precisa que «siempre he dicho que para mí enseñar los pechos es como enseñar un codo. El problema lo tiene quien mira, no quien enseña«. Para ella, «el cuerpo femenino, al igual que el masculino, es algo natural. Por el simple hecho de ser mujer y tener tetas no debería destacar de esta manera, ser cuestionada o estar de actualidad. ¿Acaso entramos en cólera cuando vemos a mujeres haciendo topless en la playa?».
Por todo ello cree que la polémica surgida en el último debate de Supervivientes «fue algo que no busqué», y subraya que «normalmente, en Telecinco me dejan unas pezoneras para poder lucir los vestidos que me apetece ponerme sin necesidad de usar sujetador. Pero en esta ocasión no tenían y no tuve problema en vestirme tal y como me apetecía, pese a las transparencias de la prenda que todos visteis».
Para finalizar, la exactriz de películas de adultos pide un cambio, «basta ya de etiquetas y juicios morales. Vivamos y dejemos vivir. Convivamos con respeto. Sigamos luchando por la libertad de la mujer».
M. A.