Pocas cosas quizás le falten por hacer en su vida, pero él sigue intentando que no le quede ninguna por realizar. De esta manera, Fernando Sánchez Dragó ha decidido estrenarse, a sus 81 años, nada menos que en el mundo del cine para adultos, gracias a ‘La doma’.
El cortometraje en cuestión contiene escenas de pornografía y sadomasoquismo, y lo ha llevado a cabo para el Festival de Cine de Los Bonobos, reservado a cortometrajes y fotografías grabados con móviles o tabletas. Una de las peculiaridades de este festival es que se debe grabar el corto en cuestión con un móvil.
En realidad, cualquier persona puede participar en dicho certamen ya que la única condición que se exige para presentarse al mismo es la de ser mayor de edad, tener un móvil y una dotada imaginación. Los cortos se suben luego a una plataforma web en a que todo el mundo puede verlos.
Fernando Sánchez Dragó optó por grabar su cortometraje con un teléfono iPhone 6S, rodando a comienzos de este 2018 en el municipio soriano de Castilfrío de la Sierra, con José María Ponce en la realización, Antonio Marcos en la fotografía y Cecilia Estévez en la dirección de arte.
Se trata de una historia de máscaras, curas, militares y panteras en la que el propio Sánchez Dragó aparece como dios Baco. El reconocido escritor presume de vitalidad y con razón, sobre todo si es verdad todo lo que dice: «Soy un buen ejemplo porque hago lo mismo ahora con 80 que cuando tenía 20, yo no me canso nunca, nunca he tenido vacaciones, sigo escribiendo, haciendo televisión, ahora queremos ir a Siria y no es una famfarronada, porque a mi edad un señor es un idiota. Esto no lo digo yo, sino la propia Anna (se refiere a la periodista Anna Grau, presente en la entrevista que ha concedido a La Razón) y hay más testimonios, pero yo a mis 80 años hago mejor el amor que a los 20, más veces, más tiempo e incluso más a menudo. No solo cantidad, sino calidad».
M. A.