Todo comenzó cuando la presentadora preguntó a los invitados si Asraf y Suso son justos finalistas.
Verdeliss se posicionó en el lado del ‘no’ y Garó en el ‘sí’. «Teniendo en cuenta la escala de valores de Miriam cualquiera podría haber sido finalista. Es educada, es una maravilla, yo recomiendo a Verdeliss que tanto la quiere que se la lleve para ayudarle con la educación de sus hijos», replicó el humorista.
Por su parte, la youtuber aseguró que prefería que Miriam le ayudara con la educación de sus hijos antes que él. Porque les enseñaría «mejores cosas». Tras la discusión, el público comenzó a abuchear, lo que provocó que el cómico amenazara con abandonar las instalaciones de Telecinco. «En la vida hay que estar acostumbrado a que te aplaudan o a que no«, le recordó la presentadora. «Te quería decir que yo abogo para que esas personas a las que tanto valoras te ayuden en la educación de tus hijos», reiteró Garó, que reprochó a Verdeliss que dijera en su día que él le daba miedo. «El delito no es tener miedo, el delito es dar miedo», se defendió ella. Minutos antes, Ángel recordó que había querido mucho a Verdeliss en su estancia en la casa. «Si esto es todo lo mejor que me puedes querer, quiéreme menos», apuntó la influencer. Finalmente, y tras un nuevo abucheo, el cómico abandonó el plató.
Esta semana, Sálvame diario se puso en contacto con Garó para preguntarle sobre el tenso momento. Una llamada telefónica que aprovechó para volver a cargar contra Verdeliss y su trabajo en la plataforma de vídeos: «Ella se dedica a negociar con sus hijos y vende lo cotidiano de ellos. No la podemos pintar como Blancanieves«.
Redacción