Han pasado ya 17 años desde el último programa de Crónicas Marcianas que se emitió el 21 de julio de 2005, muchos recordarán las bailarinas que actuaban de lunes a jueves para amenizar el late show presentado por Javier Sardá.
Una de las que más recuerda el público que estaba cada noche pegado a la televisión era Chiqui Martí, la joven catalana, autodidacta y era una de de las caras más conocidas del cabaret El Molino de Barcelona, gracias a eso dio el salto a Mediaset, ofreciendo un espectáculo diferente a lo que se emitía en las cadenas en ese momento. «Dime alguien que estuviera antes que yo bailando así en la tele«, espetó para LOC. Su éxito creció a un ritmo difícilmente igualable y comenzó a trabajar en decenas de eventos y de proyectos, pero un grave accidente en 2004 estuvo a punto de terminar de golpe con todos sus sueños, al caerse de una pool bar, que casi le deja tetrapléjica y gracias a la rehabilitación consiguió recuperarse
Durante los años posteriores siguió trabajando en diferentes proyectos, como ‘Supervivientes’ en Telecinco a crear sus propios negocios. Lanzó una firma de lencería erótica con prendas que ella misma diseñaba y abrió su propia academia de baile, un lugar que hoy es uno de los más destacados de Barcelona. que lo desee. A nivel personal se divorció hace años de su entonces marido y se casó con una mujer en 2014.
Otra de las famosas bailarinas que subió al estrellato por Crónicas Marcianas fue
Marbelys Zamora, cubana de nacimiento, que participó ha participado en varios festivales de danza, y sus primeros pasos resultaron ser muy por temporada, algo así como esporádico; participó en galas, series, o videoclips como el de Tony Santos, o en la película española El oro de Moscú del 2003.