Así se desprende de un informe de la consultora Nielsen, que cifra en un 2% el crecimiento de las ventas de esta carne en el pasado año 2019. El informe fue presentado en la Meat Attraction, una feria del sector cárnico que se celebró en Madrid el pasado mes de septiembre. La pechuga de pavo, pero también otras presentaciones como el fiambre o los snacks de Campofrío, se está convirtiendo poco a poco en un clásico de nuestras cocinas.
El crecimiento de la carne de pavo y otras carnes blancas parece una tendencia inexorable a la que también han contribuido las recomendaciones formuladas por la Organización Mundial de la Salud, que parecen priorizar estas carnes frente a las carnes rojas. La producción de pavo, segunda en importancia económica de nuestro país entre las carnes blancas, se estima en torno a 116.000 toneladas anuales, según los datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Gran parte de esa producción se destina al consumo en fresco ya que el pavo cuenta con nutrientes muy beneficiosos para nuestra salud y además ofrece muchas posibilidades a la hora de cocinarlo, es por ello que podemos encontrar gran variedad de recetas con pavo.
Características y composición del pavo
Las carnes blancas más consumidas son las de pollo y las de pavo. No obstante, hay que saber que esta división entre carnes rojas (cordero, vacuno, cerdo) y carnes blancas no es estrictamente una clasificación científica, sino que se trata de una simplificación hecha para el uso cotidiano. Las carnes rojas suelen distinguirse por su color en crudo o cocinado (como su propio nombre indica), y este responde a la presencia de una sustancia llamada mioglobina, una proteína muy oxidante e inflamatoria que además confiere a los músculos su característico color rojo.
Pues bien, la carne de pavo es ideal para cualquier dieta. Por un lado, presenta todas las ventajas de la carne ya que contiene proteínas de alto valor biológico. Por otro lado, no cuenta con algunas de las desventajas de otros tipos de carne, por ejemplo, su contenido en grasas y colesterol es muy bajo y es un alimento con muy pocas calorías (en torno a 160 kilocalorías por cada ración de 100 gramos). Otras ventajas del pavo son que su componente principal es el agua (que representa en torno al 75%) y que es rico en ácidos grasos que son cardiosaludables, de modo que contribuyen a la salud del corazón.
Entre los elementos beneficios y saludables que contiene la carne de pavo, están también los minerales (entre los que destacan el magnesio, el zinc, el potasio, el fósforo y el selenio), vitaminas del grupo B como la niacina, vitamina B6 y B12. Por si fuera poco, tiene un alto contenido en hierro y contiene pequeñas cantidades de ácido fólico.
Beneficios de la pechuga de pavo
Pues bien, a partir de estas características, podemos señalar algunos beneficios del consumo de carne de pavo sobre el consumo de otros tipos de carne:
- Es muy recurrida en dietas muy diversas, porque tiene muy poca grasa.
- A diferencia de otras carnes, puede ser consumida por personas con el ácido úrico alto.
- Es fuente de hierro, y por tanto muy recomendable para personas con anemia.
- Ayuda a prevenir enfermedades cardiovasculares.
- Es fácil de digerir, lo que la convierte en una carne ideal para niños pequeños y ancianos.
- Contribuye a mantener al sistema nervioso sano.
- Mejora la salud de la piel porque favorece la hidratación, gracias a su alto contenido de agua.
- Contribuye a mantener los huesos sanos.
Miles de recetas de cocina con pavo a tu disposición… y un par de ideas
Estos son algunos de los beneficios potenciales de consumir carne de pavo. Ahora bien… ¿cómo consumirla? Se tiende a pensar que los alimentos saludables son aburridos. Sin embargo, esto no ocurre con la carne de pavo, que además es una carne que generalmente encanta a los niños.
Hay miles de recetas de cocina pavo que hoy en día son más fáciles de encontrar que nunca gracias a Internet. A continuación, te exponemos un par de ideas:
- Pechuga de pavo con cebolla caramelizada: la pechuga es la carne más magra de toda ave, incluyendo el pavo. Siguiendo a Karlos Arguiñano, puedes preparar un delicioso plato de pechuga de pavo al brandy con cebolla caramelizada, para las que necesitarás también vinagre de Módena, miel, perejil, pimienta, sal y aceite de oliva virgen extra. Ten en cuenta además que entre las propiedades de la cebolla están la de ser digestiva y prebiótica, así que ¡estarás preparando un plato saludable y muy fácil de digerir!
- Bocadillo de tortilla, aguacate y pavo: ideal para una cena rápida y ligera. Añade a una baguette cinco lonchas de pechuga de pavo, medio aguacate machacado, una tortilla francesa y una cucharadita de zumo de limón. El resultado es delicioso y resulta en una opción completa, saludable y nutritiva.
Pilar Moreno