Lo que en España parece una utopía, que un político fuera elegido como el personaje más importante de la historia del país, en Colombia se ha hecho realidad en la figura de Álvaro Uribe, el que fuera presidente de esa nación durante ocho años, hasta 2010. La decisión la ha tomado casi un millón de compatriotas, los que votaron para otorgarle el calificativo de «Gran Colombiano» en un espacio de TV.
La idea fue del Canal Historia, que con anterioridad había llevado a cabo una experiencia similar en México y en Argentina. En el primero el elegido fue Benito Juárez, presidente de la nación en varias etapas durante la época en la que se consolidó su república, mientras que en el segundo la audiencia optó por José de San Martín, el militar que fue el artífice de las campañas militares que fueron decisivas para la independencia de su país.
Uribe, que se hizo con el 30% de los votos de la audiencia, se impuso a los otros cuatro finalistas: el escritor Gabriel García Márquez, el científico Manuel Elkin Patarroyo, el prócer Antonio Nariño y el activista y comediante Jaime Garzón.
Pese a ello, estel resultado ha provocado toda una ola de críticas y protestas en las redes sociales, donde se ha llegado a cuestionar hasta al propio Canal Historia. Los hay desde los que lo achacan todo al bajo nivel televisivo hasta los que se quejan por la no elección de cualquiera de los otros candidatos, a los que la mayoría veían como más merecedores al galardón. Incluso algunos hablan de «campaña orquestada» por el «uribismo» para ganar en popularidad. Y es que aunque la Constitución de ese país le impide aspirar de nuevo al cargo, Uribe se mantiene en la escena política como un fuerte opositor al gobierno del presidente Juan Manuel Santos, el que fuera su ministro de Defensa.