La investigación se inició a raíz de la denuncia de una mujer que indicó que había extraviado un libro antiguo en el interior de un céntrico parking de la capital.
La denunciante, que regenta un negocio dedicado al libro antiguo, indicó que se le debió caer en un descuido.
El volumen extraviado era un misal cantoral que data del siglo XVI -concretamente del año 1.526- y consta de 121 folios impresos sobre pergamino.
Tras diversas gestiones, los agentes analizaron todos los vehículos que habían abandonado el aparcamiento durante la franja horaria acotada y acreditaron que uno de ellos había procedido de forma sospechosa.
Por este motivo, localizaron a su propietario y se entrevistaron con él, quién indicó que se había encontrado el libro tirado en el suelo y se lo había llevado a su domicilio.
Los agentes intervinieron el misal cantoral “INCIPIT LIBER, processionarius secundum consuetudinem ordinis sancti patris nostrí Hieronymi” y se lo entregaron a su legítima propietaria en calidad de depósito.